Así se veía el antepasado salvaje de las ovejas, antes de que tuvieran lana
Ovejas
En muchas regiones del mundo las ovejas son el animal doméstico más importante para las personas… y es fácil saber por qué. Pocos animales ofrecen una mezcla tan completa de tejido, carne y leche, y una población puede comer y vestirse casi que exclusivamente con estos pequeños herbívoros.
Una de las cosas más interesantes de las ovejas, que pocos saben, es que son completamente dependientes de los seres humanos. Otros animales domésticos, como las vacas, las gallinas o los cerdos, pueden sobrevivir con relativa facilidad en un ambiente salvaje, en particular si no hay depredadores peligrosos. Pero no las ovejas: aún si terminan en una isla llena de alimento y sin depredador alguno van a morir eventualmente. Y la causa es bastante inesperada: la lana.
Hace algún tiempo una oveja llamada Chris se perdió en Australia por seis años, y cuando la encontraron tenía nada menos que un abrigo de 40 kg de lana. Bueno, este es un buen ejemplo de lo que ocurre cuando una oveja deja de recibir el cuidado de los seres humanos: el animal comienza a tener más y más lana y eventualmente se vuelve incapaz de caminar, de alimentarse e incluso de cargar su propio peso.
¿Cómo ocurrió este fenómeno? ¿Acaso las ovejas salvajes, antecesoras de nuestras ovejas domésticas, ya tenían problema cargando con toda su lana? Pues no: fue la domesticación la que las convirtió en una bomba de tiempo lanuda.
Domesticando las ovejas
Los antepasados salvajes de las ovejas muy posiblemente tenían pelo, más que lana. Algunas variedades actuales con esta característica aún se crían de manera regular, principalmente para carne.
Sin embargo, en las regiones en donde el invierno es muy frío estos antepasados tenían una particularidad: generaban una gruesa capa de lana en el invierno que luego, en verano, se caía. El objetivo, cómo no, era permanecer calientes durante este periodo, y evitar la muerte por hipotermia.
Fueron estas ovejas las primeras en ser domesticadas, y los documentos antiguos nos indican que una de las labores de los pastores era caminar tras de ellas a comienzos del verano precisamente para ir recogiendo los trozos de lana que se iban cayendo.
Chris, la oveja australiana que se perdió por seis años
Pero este trabajo era mucho más arduo que simplemente llevar todas las ovejas a un corral y esquilmarlas manualmente, algo que se puede hacer en un par de días para un rebaño pequeño. En este caso, lo que sucedió es que algunas ovejas comenzaron a presentar una mutación que les hacía mantener su lana por más tiempo, y fueron seleccionadas para crianza por los pastores. En condiciones salvajes, estas ovejas habrían estado en desventaja (pues se hubiesen sobrecalentado en verano), pero bajo el cuidado de los seres humanos tenían más crías que sus contrapartes con menos lana. Por esta razón, poco a poco se fue desarrollando una variedad cuya lana crece de manera continua, y que requiere ser esquilmada manualmente.
Es de esta variedad de la que descienden la mayor parte de las ovejas de lana en la actualidad, y es por eso que requieren el cuidado humano. Pero como al tener lana permanente, y no perderla, pueden mantenerla más limpia (pues nunca cae al suelo), esta característica les garantiza no solo el cuidado permanente por parte de los humanos durante toda su vida, sino un ambiente limpio y cómodo, y abundante alimento para que produzcan más lana.
El problema, claro, es que no pueden escapar… o terminan cargando con un abrigo de lana que no son capaces de manejar.
Fuentes:
- https://www.quora.com/How-did-sheep-live-in-the-wild-without-being-sheared-What-are-the-evolutionary-advantages-for-sheep-to-have-wool-grow-so-much-that-they-cannot-even-walk/answer/Mercedes-Sweazy-1
Imágenes: 1: outdoorlife.com, 2: bbc.com