Antes de ser ocupada la península griega, fue la época donde se gestó todo lo relacionado con la mitología de Grecia, la cual consta de una serie de relatos heroicos y fantásticos, que en sí misma representa un símbolo codificado de un Conocimiento Oculto y Mágico.
Esta serie de historias y relatos, transmitidos oralmente de generación en generación y gran parte en forma poética, no son como tal un dogma religioso, pero sí constituyen las posturas de los sabios griegos del pasado, acerca del Cosmos y del ser humano.
Todos los dioses de esta mitología se caracterizan por adoptar forma humana y vienen a simbolizar las fuerzas universales; en los relatos se les muestra a veces como compasivos y justos y en otras ocasiones como crueles y despiadados. Pero siempre, todas las personas buscaban sus favores y lo hacían a través de sacrificios y de buenas obras hacia los demás, aunque a veces se requerían otras cosas.
El gran filósofo y poeta Heródoto, aseveró que quienes bautizaron a los dioses, cada uno con su nombre, características, poderes específicos y desenvolvimiento en determinadas cuestiones de la naturaleza, fueron nada más ni nada menos que Hesíodo y Homero. De todas maneras, aun siendo Heródoto quien lo asegura, se debe tener en cuenta que antes de esos dos magnos filósofos, siglos atrás, la tradición oral de la mitología griega ya existía.
Historias de magia, heroismo, valentía, sabios, monstruos, doncellas y guerras, enriquecen esta cultura milenaria.
Los personajes más relevantes:
Odiseo, Zeus, Poseidon, Afrodita, Tindareo, Teseo, Sísifo, Príamo, Perseo, Peleo, Pandora, Odiseo, Minos, Midas, Iolao, Jasón, Leda, Menelao, Medea, Licaón, Ío, Ícaro, Hilas, Hécuba, Europa, Héctor, Dríope, Dédalo, Dióscuros, Clitemnestra, Aquiles, Acteón, Eaco, Eneas, Agamenon, Áyax, Alcmene, Anquises, Andrómeda, Belerofonte, Bato, Casiopea, Cefeo, Crises.
Las criaturas mitológicas griegas:
Ninfas, pájaros del estínfalo, pegasos, quimeras, quirontes, sátiros, escilas, sirenas, talos, tritón, náyades, nereidas, medusa, minotauros, lamia, jabalíes de erimanto, jabalíes de calidonia, geriones, esfinges, dríadas, cíclopes, caribdis, hidras, centauros, arpías, gorgonas.
Los poderosos titanes:
Febe, Tetis, Helios, Atlas, Hiperión, Prometeo, Rea, Selene, Teia, Temis, Océano, Epimeteo, Dione, Cronos, Crío, Ceo, Jápeto, Leto.
Los dioses menores:
Éter, Hécate, Morfeo, Pan, Noto, Niké, Tánatos, Proteo, Perséfone, Hipnos, Hebe, Glauco, Euro, Musas, Hespera, Eos, Eolo, Eros, Dionisio, Circe, Némesis, Hades, Eris, Erinias e Iris.
Estos hechos mitológicos se desarrollaron en la isla de Creta, originalmente, donde desempeñaron un papel importantísimo las deidades agrícolas y las de los pueblos aqueos, donde primaban aspectos como los mundos infiernos y la veneración a los héroes.
Grandes escritores filósofos y poetas, plasmaron todas las historias en sus obras maestras, como Virgilio, Esquilo, Apolonio de Rodas, Sófocles, Eurípides, Homero, Hesíodo, entre otros maestros sabios antiguos de Grecia.
Los principales escenarios de la mitología griega son: los campos Elíseos, El Inframundo, Lete, Olimpia, el Monte Olimpo, la Laguna Estigia, el Tártaro.
Hércules es uno de los personajes más sobresalientes y famosos de todas las leyendas griegas. Hijo de Zeus y la diosa Alcema, con una fuerza extraordinaria, quien recién nacido comenzó sus terribles y maravillosas hazañas, asesinando las dos serpientes malignas enviadas por la diose Hera, para atacarlo.
Escrito por: Diego Felipe Baquero Rodríguez.