Definición de Alopatía
De acuerdo a lo encontrado en las distintas fuentes, el término alopatía es usado para denominar la Medicina científica, la cual basa su praxis en la aplicación de principios activos químicos o intervenciones físicas, a fin de suprimir los síntomas o las afecciones patológicos que puedan afectar al cuerpo humano.
En este sentido, también es conocida como Medicina hipocrática, por provenir directamente de la rama científica derivada de Hipócrates, aunque también se le conoce como Medicina convencional, Medicina occidental, Medicina alopática e incluso como Medicina Alópata. Así misma se considera que su principio básico es conseguir la salud del individuo a través de la curación directa o su prevención, a través de la vacunación.
Origen del término Alopatía
No obstante, este término “alopático” fue acuñado recientemente en el año 1810 por Samuel Hahnemann, quien es considerado el padre de la Medicina Homeopática, con el objetivo de distinguir entre la disciplina por él planteada, y la Medicina practicada convencionalmente en el mundo occidental.
En ocasiones, se cree erróneamente que la escogencia de esta palabra tiene que ver etimológicamente con el vocablo griego allopátheia, el cual puede traducirse directamente como “dependiente de influjos externos”, sin embargo como aclaran ciertas fuentes, su origen realmente parte de una palabra compuesta por Samuel Hahnemann, en base a la unión del vocablo griego alos (otro) y pathos (sufrimiento). De esta forma el creador de la Homeopatía, colocaba a la Medicina convencional en contraposición de la planteada por él, cuya etimología estaría relacionada con los vocablos homoios (semejante) y phatos (sufrimiento). De esta manera, tanto el término “Alopatía” como “Homeopatía” corresponderían a neologismos acuñados por Samuel Hahnemann a principios del siglo XIX.
Usos dados al término Alopatía
Desde entonces, el término “alopatía”, así como sus derivados” son usados por los médicos homeópatas para referirse a aquellos médicos que siguen los principios hipocráticos y nos los hahnemannianos, a fin de poder distinguirse uno de los otros. Sin embargo, con el surgimientos de nuevas y diversas terapias de salud alternativas, el término “alopatía” surgido principalmente para diferenciar la Medicina convencional de la homeopática, ha comenzado a usarse para diferenciar a la Medicina científica, estudiada en Universidades clásicas y practicada en Hospitales y Clínicas, de toda aquella disciplina que tenga una visión distinta sobre el cuerpo, su funcionamientos, padecimientos y formas de sanación.
Origen de la Medicina Alopática
De acuerdo a los historiadores, el origen de la Medicina alopática puede situarse en los primeros atisbos de medicina tradicional, la cual usaba sus conocimientos sobre las propiedades de hierbas y tratamientos empíricos, es decir, provenientes en ese momento de la observación, y el ensayo y error. Así mismo, estos primeros pasos de la Medicina se encontraban profundamente ligados con prácticas espirituales.
En este sentido, algunas de las fuentes, sitúan el origen de la Medicina alopática o convencional en las antiguas civilizaciones griegas y egipcias, en las cuales se dieron grandes e importantes pasos en el entendimiento del cuerpo humano, sus afecciones, así como los elementos y formas en que podían revertirse. Evolucionando así durante siglos, hasta su revolución más importante surgida a raíz del descubrimiento de la Penicilina, primer antibiótico que logró el combate efectivo de ciertas infecciones que disminuían la calidad y la esperanza de vida de los humanos.
Actualmente, aunque se siguen usando hierbas y elementos de la naturaleza, como base para la extracción de los principios activos, la Medicina convencional se ha despojado totalmente de los tintes espirituales, inclinándose totalmente por un enfoque científico, basado en la observación, el método y el análisis de resultados. Avanzando a pasos agigantados durante los últimos años.
Características de la Alopatía
Así mismo los expertos en Homeopatía, han clasificado e identificado algunas características, atribuidas a la Alopatía, en base al objetivo de diferenciar ambas ramas de la curación humana. Según estas, algunas de los principales rasgos de la Medicina alopática pueden ser los siguientes:
- El objetivo principal de la Medicina alopática, de acuerdo a los homeópatas, es combatir los síntomas de las distintas afecciones, aun cuando no tenga establecido un diagnóstico claro de la afección que lo origina.
- Una vez establecido el origen de la afección en el individuo, la Medicina alopática encaminará todos los esfuerzos y métodos por eliminar de raíz todo tipo de padecimientos, aun cuando esto pueda ocasionar algunos padecimientos secundarios en el paciente, como es el caso de la quimioterapia, la cual elimina las células cancerígenas, pero también las células del cuerpo, entre ellas los glóbulos blancos esenciales para el sistema inmunológico.
- No obstante, la Medicina alopática cuenta con una amplia base científica, la cual cuenta con largos y complejos estudios, experimentos y resultados en cuanto a la efectividad de los compuestos activos suministrados al humano, así como en referencia al comportamiento y naturaleza de las bacterias, virus y hongos que afectan directamente su salud.
- Esta situación ha generado toda una industria farmacéutica, de la mano con la Medicina alopática, haciendo que muchos de los medicamentos descubiertos sean patentados por ciertos laboratorios, monopolizando su uso. A pesar de que esta industria esté regulada con la prohibición de patentar principios activos naturales, pudiendo hacerlo sólo con las fórmulas empleadas, así como con el nombre del medicamento. De allí que se discrimine entre medicamentos genéricos (aquellos que son hechos y llamados en base a su principio activo) y los no genéricos, correspondientes a cada uno de los laboratorios pionero en su fabricación.
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