El primer equipo de sonido, ¿a quién se le debe en realidad?
La historia apunta hacia Tomás A. Edison, quien diseñó un sistema de grabación de un sonido dentro de un cilindro, el cual rodaba contra una aguja. En los surcos del cilindro, la aguja subía y bajaba, generando una serie de vibraciones sonoras que resultaban amplificadas en una bocina en forma de cono y se le denominó ‘fonógrafo’.
Muchos cambios y modificaciones sufrió durante sus primeros trece años de utilización. Varios tipos de materiales fueron usados para fabricar los primeros tocadiscos llamados fonógrafos, que servían como soportes para las grabaciones y para reproducir el sonido. Estos materiales fueron probados por el mismo Edison e investigadores de Estados unidos y de toda Europa.
Los tres materiales principales fueron: primero, el papel de estaño; en seguida, el tubo de cartón parafinado y el tercero, el cilindro de cera macizo, con el cual se comenzó a comercializar este primer aparato de sonido en el mundo.
Cerca del año 1888, Emilio Berliner, un aleman que vivía en la ciudad de Washington, patentó un artefacto muy parecido al fonógrafo de Edison, pero era distinto porque no utilizaba un cilindro como soporte de grabación, sino un disco en forma plana cuya impresión se realizaba en el surco por amplitud lateral, contrario al cilindro que va de manera vertical. Berliner denominó a su invento como ‘gramófono’
Pero hay que tener muy en cuenta que los principales aparatos tecnológicos, incluyendo los de sonido, en realidad fueron inventados primeramente y de una forma demasiado avanzada para la época, fue Nikola Tesla, el verdadero autor de la radiocomunicación.
Tesla trabajó durante algún tiempo para Edison, pero éste lo trataba muy mal debido a su envidia y se aprovechó de la suprema inteligencia de Tesla. En todos los estudios sobre la electricidad y la radiofrecuencia, surgieron de la cabeza de Nikola Tesla inventos como la televisión, la radio, el radar, los celulares, los radioteléfonos, etc.
Escrito por: Diego Felipe Baquero Rodríguez