El plátano verde

Al respecto, se comenzará por decir que el Plátano verde ha sido explicado de forma general por las fuentes botánicas como el fruto de una planta rizomática, que pertenece a la familia de las Musáceas. Así mismo, los especialistas dicen que el Plátano verde –conocido en algunas regiones también como plátano macho o plátano de guisar- puede ser considerado como familia de los bananos, solo que tienden a ser mucho más grandes, de cáscara mucho más gruesa, y pulpa mucho más harinosa. El nombre científico de este producto es Musa sapientum L. var. paradisiaca.

Esta fruta, propia de los climas tropicales, se distingue por contener mucha menos azúcar que su versión madura, por lo que es protagonista de deliciosos platos salados, siendo consumido entonces en forma de puré, guisos, sopas o incluso en preparaciones hechas en base a harina. Por igual, los nutricionistas han indicado que el plátano verde es una gran fuente de fibra y de almidones de alta resistencia, lo cual hace que sea un alimento que proporciona glucosa al cuerpo más lentamente, provocando sensación de saciedad por más tiempo, y un consumo seguro en caso de padecer de resistencia a la insulina o diabetes tipo 2.

También, los nutricionistas han señalado que el Plátano verde es fuente de importantes vitaminas, como por ejemplo las del complejo B, en específico la B6. Así mismo, puede ser considerado como una fruta rica en minerales, como por ejemplo el Potasio, Calcio, Fósforo y sobre todo el importante Magnesio, el cual resulta un elemento necesario para las funciones metabólicas.

Sin embargo, el plátano verde no es solo conocido por sus grandes propiedades nutricionales, sino también por contar con grandes cualidades medicinales, entre las que se encuentran ser un alimento de gran provecho para la flora intestinal, un cicatrizante natural de las úlceras gástricas, quemador de grasa, antidepresivo, antidiarreico, entre otras cosas.

Recetas a base de plátano verde

En consecuencia, los nutricionistas recomiendan incluir el plátano verde como parte de una dieta saludable, sobre todo si se vive en zonas tropicales, de donde esta plata es originaria. Así mismo, señalan que la forma de cocinarlo, para que conserve la mayoría de sus nutrientes y propiedades es asado, hervido o en harina, puesto que –según afirman los expertos- el plátano verde puede perder parte de estas cualidades al momento de freírse, por lo que es mejor consumirlo en forma de guisos, sopas, puré o masas. A continuación, algunas de las deliciosas recetas, que pueden prepararse con esta fruta tropical:

Machucado de plátano verde y leche de coco

Esta receta es un ícono de la cocina colombiana, sobre todo de los territorios costeros, ubicados hacia el Pacífico,en donde el plátano, el tomate y la cebolla son protagonistas constantes de los platos más emblemáticos de esta región colombiana. Así también, en esta receta se puede aprovechar todo el sabor del plátano, así como de otros productos propios de la parte norte de Latinoamérica.

Para prepararlo, será necesario contar con los siguientes ingredientes: medio ( ½) plátano verde / un (1) tomate grande / un (1) pimentón verde / media ( ½ ) cebolla cabezona blanca / dos (2) ramas de cebollín / tres (3) dientes de ajo / un (1) puñado de cebollín chino / una (1) taza de crema de coco / un (1) puñado de cilantro / una (1) cucharada de panela o miel (la cual puede suprimirse) / sal / pimienta / paprika.

Reunidos todos los ingredientes, se coloca una olla con agua al fuego. Cuando esté hirviendo se coloca un poco de sal y el plátano, y se deja cocinar hasta que el plátano esté a punto de puré, es decir, bastante blandito. Mientras ese proceso de cocción sucede, se puede ir adelantando el guiso, con el que se preparará posteriormente el plátano. Para esto, se colocará un sartén al fuego, con un poquito de aceite, puede ser de oliva o incluso grasa de cerdo.

Cuando el aceite esté bastante caliente, se agregarán poco a poco la cebolla, el ajo, el cebollín y el pimentón, revolviendo, para evitar que se queme, pero manteniéndolo al fuego para que se vayan transparentando. En ese momento, se agrega igualmente el tomate cortadito en pequeños cuadritos. También se agrega un poco de sal, así como las otras especies, es decir, la pimienta y la paprika.

Cuando los vegetales empiecen a largar su jugo, se agrega la crema de coco, así como también, el cebollín chino, y cilantro al gusto, cortado finamente. Se le permite al guiso que se reduzca, rectificando en todo momento la sazón. Al momento de empezar a secarse, o dependiendo de lo líquido que se quiera, se retira del fuego.

En ese momento, se toma el plátano verde, y se machuca, buscando hacer un puré. Se le agrega el guiso y se revuelve. Por lo general, este machucado de plátano verde se acompaña con pescado, aun cuando también puede ser el acompañante ideal, nutritivo y sin calorías de una pieza de pollo o carne. En cuanto al emplatado, se puede optar por tomar la masa de plátano, y con la ayuda de un molde, darle ciertas formas. Así mismo, el pescado o carne con que haya de presentarse podrá ir a un lado, o también sobre ella.

Arepas de plátano verde

Otro de los grandes retos para quien inicia un régimen alimenticio que quiera dejar atrás las harinas es privarse de los alimentos cotidianos, como por ejemplo la arepa. Sin embargo, el plátano verde es un sustituto formidable del maíz, por lo que puede aprovecharse su consistencia harinosa. Para realizar estas deliciosas arepas, será necesario tener a disposición cuatro plátanos verdes y grandes / tres (3) cucharadas de aceite de coco / y sal al gusto.

Teniendo todo a mano, se tomarán los plátanos, se lavarán, pelarán y se llevarán al fuego por cinco minutos. Se cocinarán hasta que consigan el punto de puré. En ese momento se bajan del fuego, y al retirarse del agua, se comienza a aplastar, a medida que se combinan con el aceite de coco. Igualmente, en el proceso los plátanos irán perdiendo calor, por lo que podrán procesarse con la mano. Luego de amasar, y lograr la consistencia deseada, así como la sazón, se arman las arepas, y se colocan en una plancha, con un poquito de aceite, hasta que estén tostaditas. Estas arepas se pueden acompañar con huevos, o con jamón, para un desayuno o cena nutritiva.

Waffles de plátano verde

Y no solo es el maíz al que puede reemplazar el plátano verde, sino que este también puede convertirse en un sustituto eficaz para la harina de trigo. Un ejemplo de esto lo constituyen los waflles de plátano verde, los cuales pueden hacerse de forma dulce, para acompañar con frutas, o salados, para acompañar con carnes.

Para prepararlos, se requerirá tener a disposición los siguientes ingredientes: dos (2) plátanos verdes, de buen tamaño / tres (3) huevos / una (1) taza de leche de coco / una (1) cucharadita de aceite de oliva / y tres (3) cucharaditas de sal marina (en el caso de quererlos salados) o tres cucharaditas de miel, si la opción elegida es la versión dulce.

Cuando se tengan todos los elementos a disposición, se colocará una olla de agua al fuego, hasta que esta hierva. En ese momento, se agregan los plátanos, los cuales deben haberse cortado en rodajas de no más de cinco centímetros, dejándolos cocinar por al menos 45 minutos. Pasado esto, se sacan del agua, y se dejan secar. Se toma un mortero, y se comienza a macerar, buscando convertirlo en polvo.

Conseguida la contextura deseada, se tomará la harina de plátano –la cual se puede comprar también ya lista- y se le agregarán los huevos, el aceite, la sal o la miel (según como se deseen) y la leche de coco, y se procede amasar, hasta lograr una masa compacta. Al obtener la consistencia deseada, se coloca en la wafflera, en donde se dejarán unos diez minutos. Y ya está listo para disfrutar.

Ceviche de plátano verde

Finalmente, para aquellos amantes del ceviche, que por alguna razón no quieran o prefieran no consumir pescado, también existen opciones, para seguir disfrutando de este plato típico latinoamericano. Para prepararlo, se necesitará tener a disposición cuatro (4) plátanos verdes / dos (2) tomates rojos medianos / un (1) puñado de cilantro  / media (½) cebolla cabezona morada / una (1) onza de vinagre blanco / cuatro (16) limones por cada plátano.

Teniendo todos los ingredientes a mano, se deberá comenzar por tomar los plátanos, pelarlos y cortarlos en pedacitos pequeños. Así mismo se cocinarán en agua por unos cuarenta minutos, o hasta que el plátano se torne blando. En un recipiente, se colocarán el resto de los ingredientes picados en cuadritos, es decir, las cebollas y los tomates, mientras que el cilantro se picará finamente. Y se reservan.

Cuando el plátano esté cocido, se tomará y se picará en cuadritos pequeños. Posteriormente, se revolverán con los otros ingredientes. Se bañarán con la onza de vinagre, así como el jugo de limón y la sal. Se mezcla, y ya está listo para disfrutar con algún snack o incluso con chips de plátano.

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