Antes de exponer algunas de las recetas más populares que se puedan encontrar en las redes sobre postres a base de arándanos azules, puede que sea conveniente revisar de forma breve algunas definiciones sobre algunos aspectos relacionados a esta fruta, como por ejemplo su naturaleza, origen y propiedades.
El arándano azul
De esta manera, se comenzará por decir que el arándano ha sido explicado como una fruta, que nace de un arbusto silvestre, reconocido por la Botánica con el nombre de Vaccinium corymbosum, el cual pertenece a su vez al género Vaccinium. Así mismo, este tipo de fruta, conocida también por su nombre en inglés blueberries, se caracterizará también por ser de tamaño pequeño, color azul profundo o incluso púrpura y también por su dulce sabor.
Origen
En cuanto al origen de esta pequeña y dulce fruta, la mayoría de los autores coinciden en señalar que los arándanos azules pueden ser también identificados como propios o nativos del continente americano, específicamente de los territorios ubicados al norte de éste, en los que actualmente se encuentran ubicados Estados Unidos y México, lugares en donde sus habitantes originarios los conocían y consumían desde miles de años antes de la llegada de los europeos.
De hecho, desde entonces, Estados Unidos se ha mantenido a la vanguardia de la producción de arándanos en el mundo, seguido por México. No obstante, a lo largo de esta plataforma continental existen otras especies como por ejemplo los arándanos rojos o el agraz. Así mismo, al parecer han indicado la mayoría de los autores, desde hace milenios, los habitantes originarios del continente americano reconocían a los arándanos en general como una gran fuente alimenticia, nutricional y también poseedores de grandes propiedades medicinales.
Propiedades del arándano
En este sentido, las diferentes fuentes señalan que los arándanos pueden ser reconocidos nutricionalmente como una fruta rica en Proteínas, Fibra y Carbohidratos. Así mismo, pese a que contiene una buena cantidad de fructuosa, en realidad el azúcar que existe en los arándanos no representa un riesgo para la salud.
De igual forma, los especialistas en nutrición han señalado que los arándanos son reconocidos también como una fuerte importante de vitaminas, entre las que se encuentran algunas muy importantes del complejo B, como por ejemplo la B1, B2, B3, B5, B6 y B9, u otras vitaminas como por ejemplo la C, E y K. Por otro lado, los arándanos azules también son tenidos como fuentes de importantes compuestos minerales vitales para la salud humana, como lo son el Hierro, Calcio, Magnesio, Manganeso, Fósforo, Potasio, Sodio y Zinc.
Con respecto a las propiedades medicinales asociadas a esta fruta americana, los manuales de Medicina naturista señalan al arándano azul como un importante antioxidante, el cual puede incidir de manera importante en la prevención de ciertas enfermedades degenerativas, así como de otras enfermedades como el cáncer. Así mismo, el consumo de arándanos está asociado a una buena salud cerebral, tanto desde el punto de vista de la velocidad de pensamiento, así como de la capacidad cognitiva.
Entre otros de los beneficios de los arándanos, se encuentra el de ser una gran fuente de vitamina C, lo que por un lado convierte a esta fruta en un gran alimento para combatir los resfriados o gripes, y por otro –combinado con el Hierro que contienen los arándanos azules, y que l vitamina C ayuda a asimilar- en una gran arma contra la anemia. Por otro lado, esta fruta es tenida también como un elemento rico en vitamina A, componente que convertiría a los arándanos en un alimento propicio para la salud visual, ayudando al cuerpo a combatir contra la fatiga ocular, así como para mejorar la visión nocturna.
Finalmente, entre las muchas propiedades medicinales de los arándanos también se encuentra la de ser una gran protectora del sistema urinario. En este orden de ideas, quienes afirman esta cualidad señalan que los arándanos cuentan con una sustancia que hace imposible que ciertas bacterias se adhieran a las paredes de la vejiga, y del tracto urinario en general, por lo que entonces los arándanos se convierten en una buena forma de luchar contra las infecciones urinarias, así como sobre la cistitis. Además, al contener una buena cantidad de Magnesio, los arándanos también ayudan al cuerpo a evitar que el calcio escape de los huesos a otros órganos, y sea expulsado por medio de la orina, ayudando entonces a prevenir la formación de cálculos renales.
Recetas dulces a base de arándanos
No obstante, los arándanos no se han ganado un puesto privilegiado dentro de los paladares del mundo solo por sus grandes propiedades nutricionales y alimenticias, sino que estas frutas también se destacan por su delicioso sabor, así como por su atractivo y seductor color, las cuales la convierten en el complemento ideal de las más deliciosas recetas, siendo la preparación de postres la opción favorita de quienes deciden apostar por el uso de los arándanos azules o blueberries. A continuación, algunos ejemplos de estas deliciosas recetas:
Budín de cacao y arándanos
Pese a que casi siempre, en la preparación de postres se busca usar bases claras, que le permitan a los arándanos resaltar, también puede suceder que se busque combinar su delicioso sabor con el delicado gusto del chocolate. Un ejemplo lo constituye este postre, para cuya preparación será necesario reunir los siguientes ingredientes: un cuatro ( ¼ ) de libra de arándanos / un (1) sobre de mousse de chocolate para preparar / un (1) litro de leche de almendras / tres (3) cucharadas grandes de miel / cuatro (4) tazas de harina / una (1) cucharadita de polvo de hornear.
Para iniciar con la preparación, será necesario entonces procesar los arándanos azules. Para esto, se lavarán con bastante agua y un chorrito de vinagre. Nuevamente enjuagados, se procederá, si se quiere con ayuda de un pisa papa, a procesar los arándanos, hasta convertirlos en puré. Así mismo, se deberá hacer la preparación del budín, para lo que se disolverá el contenido del sobre en la leche de coco, mezclando hasta obtener una preparación homogénea. Así mismo, se agregará el puré hecho con los arándanos, la miel y posteriormente la harina y el polvo de hornear, mezclando hasta conseguir que todos los ingredientes se integren.
Una vez preparada la masa, y viendo que ella cuenta con su estado más homogéneo, se procederá entonces a llevar la masa a un recipiente para hornear budines, el cual debe haberse enharinado y enmantecado previamente. Por último, se llevará al horno por un tiempo de 30 minutos, tiempo en el cual debe cocinarse por dentro y dorarse por fuera. Se espera a que se enfríe antes de desmoldar, y se sirve fría.
Waffles de arándanos
No obstante, no siempre es necesario esperar al postre después del almuerzo o a media tarde, para disfrutar del dulzor de los arándanos, pues estos pueden ser degustados desde la mañana, en un rico y nutritivo desayuno, constituido por ejemplo por estos ricos y deliciosos waffles, que combinan a la perfección el rico sabor de los arándanos, con el crujiente característico de este plato.
Al momento de preparar estos waffles, se deberán reunir los siguientes ingredientes: un (1) huevo / un cuarto ( ¼ ) de leche / dos (2) cucharadas de aceite vegetal / tres (3) cucharadas de miel / una (1) cucharada de esencia de vainilla / un (1) sobre de mezcla para waffles / una (1) cucharadita de polvo para hornear / un cuarto ( ¼) de libra de arándanos.
Una vez se han reunido los ingredientes, se colocará en un recipiente para mezclar el huevo, el aceite, la leche, la miel y la cucharadita de esencia de vainilla, elementos que se irán agregando e integrando con ayuda de una batidora. Cuando se ha obtenido una mezcla homogénea, se procede entonces a integrar los ingredientes secos, como la mezcla para waffles y el polvo de hornear, volviendo a mezclar hasta que todos los elementos se integren. En ese momento, se agregan los arándanos, teniendo cuidado de apartar algunos para adornar los waffles.
Se procede entonces a llevar la masa, y cocinarla en una wafflera, la cual debe haberse untado con manteca previamente, para así evitar que los waffles se peguen. Cuando estén completamente dorados, se procede entonces a retirar y servir. Los waffles pueden acompañarse de mermelada o un chorrito de miel, así como los arándanos que se apartaron previamente. También se pueden comer con trozos de banana o fresas.
Helados de arándanos
Por último, una buena opción para preparar arándanos en platos dulces es el helado de arándanos. Aun cuando existen varias versiones de esta receta, en realidad esta resulta ser una de las más prácticas y caseras. Para prepararla, se necesitará tener a disposición los siguientes ingredientes: media ( ½ ) libra de arándanos limpios / un cuarto ( ¼ ) de libra de azúcar / un cuarto ( ¼ ) de litro de agua / una (1) taza de jugo de limón / media ( ½ ) libra de crema de leche.
Al momento de realizar la mezcla, se comenzará por escoger los arándanos que se encuentren en mejor estado, además de maduros. Se lavarán, y con la ayuda de una licuadora se procesarán. Así mismo, en paralelo se realizará un almíbar, para lo cual se mezclarán en una olla el azúcar y el agua, llevándolas posteriormente al fuego, para dejarlos hervir por al menos dos minutos.
Cuando este almíbar se haya enfriado, se procederá a agregar el limón, así como el jugo de arándano, previamente colado. Se mezcla nuevamente la preparación hasta conseguir que todos los ingredientes se integren. En ese momento, se procede también a agregar la crema de leche, además de algunos trocitos de arándanos, que le pueden dar un toque de sabor y una textura un poco más artesanal al helado.
Después de mezclar muy bien, se coloca la preparación de helados de arándanos en compartimientos para helados, o vasitos, y se llevan al congelador, hasta que obtengan la textura de helado. Si se deseará una textura un poco más cremosa, luego de que la preparación ha cuajado, se puede volver a batir con la ayuda de la batidora.
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