En el ámbito de la Literatura universal, se conoce con el nombre de Al faro (To the lighthouse, por su título original en inglés) a una de las célebres novelas de la escritora británica Virginia Woolf, la cual fue publicada por primera vez, en el año 1927, gracias al trabajo de la editorial Hogarth Press.
Trascendencia de Al faro
Esta novela de Virginia Woolf ha sido considerada por la Crítica como una de las novelas esenciales de la narrativa modernista del siglo XX. En ella, así como en el Ulises de Joyce, o en la obra En búsqueda del tiempo perdido de Marcel Proust, no pasa absolutamente nada significativo, pues el interés no está en la descripción del paisaje, o en la acción, sino en el mundo interno, emotivo y psicológico de los personajes que constituyen la obra.
De esta manera, Al faro se convierte también en una de las tantas novelas del siglo XX que dejan atrás la existencia del personaje literario, para dar paso por primera vez a la persona en la narrativa. En consecuencia, el protagonista comienza a ser el pensamiento y las emociones de las personas sobre las cuales se habla, dando paso así también a la novela psicológica.
Resumen de Al faro
Con respecto a su contenido, Al faro puede considerarse una obra conformada por tres partes, en donde básicamente se cuentan dos días específicos en la vida de la familia Ramsays, en relación con una visita al faro, entre los cuales existe una separación de diez años. En el primer día, la familia desea ir al faro, sin lograrlo, mientras que en el segundo día de reunión, efectivamente se dirigen a la estructura.
Estos momentos, en realidad parecieran servir de excusa para exponer el mundo interior de las personas sobre las cuales se habla, así como las tensiones y rivalidades que existen entre sus distintas formas de pensar, teniendo como telón de fondo la figura de la mujer artista. Sin embargo, puede que la mejor forma de abordar un resumen sobre esta novela de Virginia Woolf sea analizando brevemente cada una de sus partes, tal como puede verse a continuación:
La ventana (parte I)
La primera parte de esta novela transcurrirá durante una velada organizada por la familia Ramsays, en su casa de verano, ubicada en la isla de Skye. Sin embargo, la armonía de la reunión es afectada desde el primer momento, debido a una división de opiniones entre el señor y la señora Ramsays sobre sus respectivas predicciones en cuanto a si al día siguiente habrá o no buen clima, para navegar hasta el faro, un lugar que los visitantes desean conocer.
En la reunión, se encuentran presentes los esposos Ramsay, el joven James, hijo de los Ramsay, así también como Lily Briscoe, una joven pintora, quien pese a su talento es bastante insegura. Ella se encuentra presente, pues tiene como misión hacer un retrato de la señora Ramsay y su hijo James.
Sin embargo, las inseguridades de Lily aumentan cada vez más ante los incisivos comentarios de otro de los invitados, Charles Tansley, ferviente admirador de las disertaciones del Sr. Ramsay, y quien no tiene ningún reparo en comentar que para su parecer, realmente ninguna mujer podría convertirse en una buena escritora o pintora, siendo esto –al menos para él- un oficio y un arte, destinados totalmente al hombre.
A la reunión también asisten, sólo que un poco tarde, Paul Rayley y Minta Doyle, quienes con su retraso e impuntualidad están a punto de quebrantar la frágil armonía que la Sra. Ramsay trata de mantener a toda costa. La visita termina sin que los Ramsay visiten el faro.
El tiempo pasa (parte II)
Durante este pasaje del libro, en realidad no pasa nada, sino que el narrador deja correr sin mayor apuro los acontecimientos que pasaron en la vida de cada uno de los presentes en la velada de los Ramsay. Por consiguiente, se da noticia de cómo la Sra Ramsay fallece, dejando a su marido a la deriva, entre otros personajes que también pierden la vida.
De esta manera, en un ejercicio literario, en donde Woolf trata de tejer un pasaje de palabras, entre la primera velada y la última parte de la historia, el lector realmente tiene la sensación de leer el paso de 10 largos años, muchos de los cuales tuvieron como escenario la Primera Guerra Mundial.
El faro (parte III)
Transcurridos 10 años de la primera reunión, los Ramsay deciden emular aquella velada, por lo que se dan cita nuevamente los personajes a la casa de verano, al menos los sobrevivientes. En vista del buen tiempo, el señor Ramsay decide que ese día sí harán el viaje que no lograron hacer aquella vez.
En así como el Sr. Ramsay, su hijo James, su hija Cami, un pescador y su hijo, y la pintora Lily Briscoe deciden partir rumbo a la edificación. A medida que navegan, las tensiones tan presentes en la primera parte comienzan a desvanecerse, y cada persona parece disfrutar del paisaje, y hasta vivir un proceso de reconciliación consigo mismo, y con su semejante.
Así también, la pintora Briscoe decide culminar el proyecto iniciado hace diez años: pintar a la Sra. Ramsay y su hijo James, por lo que toda la familia acude en rescate de su memoria, para tratar de evocar sus rasgos. Lily Briscoe culmina su obra, la cual la satisface, porque más allá de la fama que pueda conseguir, en realidad está feliz de haber logrado plasmar su propia visión, enseñanza que queda en el aire, insinuándose que el Sr. Ramsay, quizás deba aprenderla también.
Imagen: retrato de Virginia Woolf, autora de la novela Al faro / Fuente: wikimedia.org