Primeros años

De esta manera, tal como se puede encontrar en varias fuentes biográficas, que Felipe Luis Brión Detrox nació el 5 de julio de 1782, en la isla de Curazao, convirtiéndose en el quinto hijo Pedro Luis Brión, de profesión comerciante, y su esposa María Detrox, residentes de Curazao, pero identificados ambos como súbditos de la corona Holandesa y oriundos del territorio identificado actualmente como Bélgica. En 1794, cónsono con las costumbres de los inmigrantes europeos en Curazao, Luis Brión fue enviado a los Países Bajos: tenía doce años de edad.

Inicios como militar

Así mismo, sus biógrafos refieren el año 1799 como el momento en que Luis Brion, quien para ese momento contaba con diecisiete años, se unió a las tropas del Ejército de la República Bátara, a fin de defender al reino de Holanda ante la invasión que pretendían los ingleses. De esta forma, durante su primer año, participó en importantes batallas, en suelo europeo septentrional, hasta que fue apresado por los ingleses, situación que se resolvió finalmente en la Convención de Alkmaar.

Regreso a Curazao

Luego de su liberación, Brion regresó a Curazao, en donde pasado un tiempo, decidió sumarse al movimiento insurreccional, que ocurrió en este territorio durante el año 1800, y que precedió por meses a la primera ocupación inglesas. Decidido a no volver a convertirse en prisionero británico, Luis Brión decidió refugiarse en Estados Unidos, lugar en donde se dedicó a estudiar Ciencias Naúticas, al tiempo que incursionó en el mundo de los negocios marítimos, habilidades que le servirían en el futuro en la gesta independentistas.

Tres años después, en 1803, Luis Brion vuelve a Curazao, territorio que había sido recuperado por las fuerzas holandesas. Durante su estadía, siguiendo quizás los pasos de su padre, se dedicó a las actividad comercial. Igualmente, desde su llegada participó en varias campañas, dirigidas a combatir los intentos ingleses por conquistar de nuevo Curazao. No obstante, cuatro años después, cuando la isla fue sometida nuevamente a una invasión británica, este futuro héroe independentista decidió exiliarse en Saint Thomas, que para ese momento estaba bajo control de Dinamarca, en donde continuó desarrollando su actividad comercial.

Proceso Independentista venezolano

En 1813, después de conocer a Simón Bolívar en Haití, Luis Brión decide unirse a la causa independentista venezolana, partiendo entonces hacia el territorio de la para ese entonces Capitanía General de Venezuela. De esta forma, en agradecimiento, en 1814, el general Simón Bolívar lo hace venezolano, ascendiéndolo además al grado de Capitán de Fragata.

Con la intención de participar en la liberación de la Gran Colombia, Brión parte hacia territorio inglés, donde logra adquirir una embarcación, la corbeta Dardo, sobre la cual regresa para enfrentar con los 24 cañones y 12 fusiles de esta nave a las fuerzas realistas, que bajo el mando de Morillo azotaban al ejército patriota en Cartagena de Indias. Empero, la misión resulta en un fracaso, pues las fuerzas de Pablo Morillo logran imponerse. Brión huye hacia Haití, en donde se reúne nuevamente con Simón Bolívar.

Expedición a Venezuela

Envestido con el grado de Capitán de Navío, otorgado por el propio Bolívar, durante su reunión en Haití, Luis Brión parte hacia Venezuela, en donde realiza una expedición sobre la costa venezolana, conocida como la primera que haya sido realizada con fines independentistas, y que produjo rápidamente los primeros enfrentamientos con las tropas realistas. De esta forma, el 2 de mayo de 1816, Brión logra vencer avasallantemente en la Batalla naval de los Frailes, victoria que hace que reciba de manos de Simón Bolívar un nuevo ascenso, obteniendo entonces el grado de Almirante de la República.

Actuación en el oriente venezolano

Así mismo, Luis Brion tomó el control completo de la Isla de Margarita. Una vez que las fuerzas patriotas estuvieron totalmente posicionadas, Luis Brión decidió seguir descendiendo por el oriente del territorio venezolano, dirigiéndose con sus hombres hacia el territorio de Guayana, en donde despliega una campaña de mismo nombre. Navegando el Orinoco con su escuadra, el 4 de agosto de 1817 logra vencer nuevamente a los españoles, en el Combate Naval de Cabrián, donde consigue una gran victoria, haciéndose con mil quinientos prisioneros, y la mitad de la flota inglesa.

Es así como, nombrado también Presidente del Consejo de Guerra, forma parte de la organización político militar establecida para someter a juicio al general Manuel Piar, a quien las tropas independentistas acusaron de traición, insubordinación y deserción, entre otros delitos, que le valieron finalmente la condena a la pena máxima. De esta forma, el general Manuel Piar fue fusilado en la plaza mayor de Angostura, el 16 de octubre de 1817, sin haber sido degradado de sus envestiduras militares, por orden de Simón Bolívar, quien confesara a futuro que fue una de las decisiones más difíciles que llegó a tomar y acatar. Por su parte, ese mismo año, Luis Brión es designado Presidente del Consejo de Gobierno, como premio por haber conseguido con sus hombres la liberación de Guayana.

Diferencias con Montilla

Dos años después, en 1819, Luis Brion se encuentra localizado nuevamente en Margarita, desde donde lidera una expedición patriota, con la que pretende sitiar a las fuerzas realistas que se encontraban bajo control del territorio costero de la Nueva Granada, acción que contaría con el apoyo del general patriota Mariano Montilla, quien comandaría las fuerzas terrestres. La expedición logró grandes victorias, como por ejemplo la toma y recuperación de las ciudades costeras de Barranquilla y Santa Marta, así como los puertos y bocas a lo largo del Rio Magdalena. No obstante, Brión y Montilla no coincidían en estrategia ni objetivos, diferencias que en lugar de solucionarse se fueron agravando al punto de que Luis Brión decidió separarse de sus funciones dentro de la Marina independentista, dirigiéndose a Maracaibo.

Regreso final a Curazao

No obstante, para ese entonces, sus biógrafos señalan que Luis Brión padecía de una fuerte tuberculosis, por lo que sintiendo su salud bastante deteriorada decide embarcarse hacia su Curazao natal, donde llega el 26 de septiembre de 1821. Un día después, el 27 de septiembre de 1826, su salud empeora terriblemente, haciendo que este prócer latinoamericano fallezca sobre suelo curazoleño. Su cuerpo fue enterrado con honores en un cementerio familiar, ubicado en la finca Rosentak. Sin embargo, el 10 de abril de 1882,  fueron trasladado al Panteón Nacional de Venezuela, ubicado en la ciudad de Caracas, en donde reposan desde entonces.

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