Rosa Agazzi (1866) y Carolina Agazzi (1870), Volengo, Verona, Italia. Pedagogas italianas, conocidas históricamente como las hermanas Agazzi, y quienes son valoradas por su gran trabajo en la educación inicial infantil, área en donde desarrollaron un nuevo método educativo, dirigido a niños entre los 0 y 6 años, el cual concebía al infante como un sujeto activo, quien debe participar en todos los proyectos, y que debe recibir la estimulación adecuada a sus sentidos.
Primeros años
De acuerdo a lo señalado por sus biógrafos, Rosa Agazzi nació en el año 1866, en la ciudad de Volengo, perteneciente a la provincia italiana de Verona. Cuatro años después, en esta misma ciudad italiana, nace su hermana, Carolina Agazzi.
La poca diferencia de edad entre las hermanas Agazzi quizás influyó en la coincidencia en su vocación. De esta manera, ambas cursaron sus estudios superiores en la Escuela Normal del Magisterio de Brescia, de donde egresaron como Educadoras. Sin embargo, tenían especialidades distintas, pues mientras Rosa Agazzi se interesó por la Educación Básica, su hermana Carolina prefirió enfocarse en la Educación Parvularia, es decir, en la Educación dirigida a los niños entre 0 y 6 años de edad.
Educación para párvulos
No obstante, hacia el año 1891, ambas tienen la oportunidad de participar en un Congreso para maestras de párvulos, momento en que Rosa toma la decisión de unirse al área de su hermana Carolina. Desde entonces, los párvulos serían la población con la que trabajarían estas educadoras.
Un año después, cada una de ellas se encontraba ya al frente de instituciones educativas, dirigidas a la primera infancia. Durante estas experiencias, las hermanas –quienes trabajaban juntas- comienzan a anotar sus observaciones, así como a poner en práctica sus conocimientos pedagógicos. Es así como las hermanas Agazzi dan sus primeros pasos en lo que años después se conocería como el Currículo o método Agazziano.
Método pedagógico Agazziano
Pese a que su trabajo en cuanto al desarrollo de un nuevo sistema educativo se inició durante estas primeras experiencias como directoras de jardines infantiles, no es hasta el año 1895, cuando deciden ponerlo en práctica. Es así como el destino las llevó a asumir la dirección del parvulario Mompiano, el cual se convirtió en el sitio en donde fue aplicado por primera vez lo que más tarde se conocería como el Currículo Agazziano.
Algunos educadores han resaltado que esta primera experiencia es sumamente enriquecedora, pues en este parvulario existía una diversidad social y económica entre los alumnos, que parecen respaldar la universalidad y funcionalidad de este programa pedagógico incipiente. Empero, es hasta el año 1898 cuando las hermanas Agazzi están preparadas para exponer en el Congreso Pedagógico Nacional, desarrollado en Turín, parte de su experiencia. La ponencia de estas educadoras llevó por nombre “Ordinamiento Pedagógico del Giardini d´Infanza secondo il sistema di Froebel. Desde entonces, las hermanas Agazzi se esforzaron en difundir sus enseñanzas.
Pese a que son muchas las áreas del niño que este programa desea desarrollar, básicamente se puede decir que apuesta a la intuición del infante, así como en la utilidad de los conocimientos en la vida. Así mismo, basa la enseñanza en procurar, a través de distintos métodos lúdicos y pedagógicos una Educación sensorial, una Instrucción intelectual y una Educación del sentimiento, considerando que estos son los tres ejes fundamentales en los que debe basarse la educación del niño.
Años finales
Estas mujeres y educadoras siguieron durante años formando a otros pedagogos, respecto a su legado, el cual básicamente se puede describir como un importante sistema educativo que cambiaría para siempre la Pedagogía, y que resaltaba por dejar de ver al niño como un sujeto pasivo-receptor a una sujeto activo e intuitivo, el cual además no acarreaba mayores costos, pues estaba pensado para realizar con materiales reciclables y actividades, que pueden implementarse en cualquier estrato social.
Finalmente, en el año 1945 falleció en su ciudad natal Carolina Agazzi. Seis años después, en el año 1951, la siguió su hermana Rosa Agazzi. Ambas son reconocidas como una de las más importante precursoras de la Educación a la primera infancia, sobre todo por desarrollar un método, que además de educar a los niños, los dotaba con herramientas que los harían más aptos para la vida diaria.
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