Se puede definir como introducción el discurso o texto que sirve de preparación e información general sobre un tema determinado, a fin de que quien se acerca por primera vez a su contenido, pueda hacerse una idea de cuáles son los elementos que lo conforman.
De esta forma, una introducción sobre una disciplina debería en principio decir claramente cuál es el campo de estudio de dicha materia, es decir qué estudia y con qué objetivo. Acto seguido debería entonces contextualizar un poco cómo surgió y quizás quiénes fueron sus principales representantes. Igualmente, debería comentar claramente cuáles son las áreas que le competen y las ramas que las conforman. Finalmente, en aras de realizar una introducción completa, también se puede ofrecer una contextualización de dicha materia en el mundo actual, a fin de explicar sus alcances e importancia.
A continuación, se presentará entonces una breve introducción a la Ciencia de la Biología, a fin de exponer un ejemplo de cómo podría ser un texto redactado con este propósito:
Concepto de Biología
En el ámbito científico se conoce con el nombre de Biología a la ciencia que se encarga de estudiar a los seres vivos, a fin de identificar, registrar y establecer todos los datos relacionados con su estructura, anatomía, funcionamiento, hábitos, formas y niveles de interrelación, reproducción, patogenia, e incluso de dónde provienen y cómo han evolucionado a lo largo del tiempo, como forma de entender las leyes que rigen sobre la vida y cómo se produce esta.
Etimología de la palabra Biología
En cuanto al término Biología, los especialistas en etimología han destacado que este vocablo está conformado por dos palabras de origen griego: bios, que puede traducirse al español como “vida”, y –logía, que proviene de la voz logos, que significa estudio, por lo que etimológicamente la palabra Biología refiere directamente a la práctica de esta Ciencia: el estudio de la vida.
Implementación del término Biología
Igualmente, en su sentido filológico, los investigadores han determinado que la palabra Biología comenzó a usarse durante el siglo XVIII, para referirse a la ciencia que estudia el comportamiento y la forma de los seres vivos. En este sentido, los expertos han señalado como primer antecedente del uso de la palabra Biología con este significado al científico Michael Christoph Hanow, quien en el año 1766, publicó una obra, cuyo tercer tomo se titulaba: Philosophiae naturalis sive physicae dogmaticae: Geología, biología, phytologia generalis et dendrologia.
Sin embargo, los investigadores apuntan que esto es un primer antecedente, pero que se debería esperar al menos cuatro décadas más, para que a principios del siglo XIX, científicos como Gottfried Reinhold Treviranus escribieran obras como Bilogie oder Philisophie der Natur, en la cual hace uso de la palabra Biología. A partir de este año, su uso se haría cada vez más extendido, hasta la actualidad en la que es un término reconocido por la Academia y de manejo común, incluso para hablantes no relacionados con esta Ciencia.
Principales ramas de la Biología
En cuanto a las áreas de estudio de esta Ciencia es importante destacar que el objeto de estudio –los seres vivos- es tan complejo y amplio, que con los años la Biología ha venido especializándose y ramificando sus materias de investigación, llegando a la actualidad en donde se pueden identificar más de treinta disciplinas, que se complementan e interrelacionan entre sí. Estas serían las siguientes:
Anatomía, Antropología, Bacteriología, Biofísica, Epistemología biológica, Biología marina, Biología matemática, Biomedicina, Bioquímica, Biotecnología, Botánica, Citología, Citogenética, Citopatología, Citoquímica, Ecología, Embriología, Entomología, Etología, Evolución, Filogenia, Fisiología, Genética, Genética molecular, Histología, Histoquímica, Inmunología, Micología, Microbiología, Organografía, Paleontología, Taxonomía, Virología y Zoología.
No obstante, esta gran cantidad de disciplinas pueden abarcarse en cuatro principales áreas de estudio, las cuales serían las siguientes:
Disciplinas que estudian la estructura de la vida: en esta área se encuentran incluidas materias como la Genética, la Biología Celular y la Biología Molecular. Básicamente se interesan por estudiar los elementos que conforman los organismos complejos, encargándose entonces del estudio de las estructuras celulares genéticas.
Disciplinas que estudian la Fisiología: en segundo lugar, materias como la Fisiología y la Anatomía conforman esta gran rama de la Biología, la cual tiene como objetivo entender la forma de los diversos organismos vivos, su funcionamiento, cómo se formaron y de qué partes están hechos, a fin de entender la anatomía de éstos. Así mismo, le interesa precisar cómo se interrelacionan entre ellos y con el medio ambiente.
Disciplinas que estudian la Evolución y la diversidad: así mismo, la Biología cuenta con una tercer área que se interesa por estudiar a los seres vivos, pero desde una perspectiva evolutiva, a fin de determinar el origen de las especies, los procesos que han transitado, los ancestros comunes, e incluso hacia dónde se dirigen las especies. Igualmente, esta área siente el interés por agrupar y clasificar las especies conocidas y por conocer, en su interés por ordenar la vida conocida, para poder entenderla.
Disciplinas que estudian la interacción: finalmente, existen otras materias como la Ecología y la Etología, cuyo fin último es registrar y entender cómo se producen las interacciones entre los distintos individuos, así como con su medio ambiente.
Importancia de la Biología
De lo anterior se puede concluir entonces que el propósito fundamental de la Biología es estudiar los seres vivos desde todos los ángulos posibles, los cuales van desde el nivel celular hasta su comportamiento en la naturaleza, pasando por su conformación y origen. De esta forma, la Biología contribuiría a entender y comprender las leyes por las cuales se rige la vida, así como los tipos de vida que hay, hechos en donde reside precisamente su importancia.
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