Usualmente solemos pensar que a las grandes celebridades no les pasa ningún accidente extraordinario o insólito, que están protegidas como en una burbuja. Sin embargo, no siempre es así, y la historia de Anna Nicole, una conocida modelo playboy es uno de esos casos.
Una vida azarosa
Anna nació en Houston en 1967 y llevó una vida azarosa. Siendo tan sólo una niña fue abandonada por su padre, en su adolescencia trabajó como camarera y en 1985, con tan sólo 17 años contrajo matrimonio con Billy Smith, con quien tuvo a su hijo Daniel, mismo que moriría en 2006 a causa de un cóctel mortal de medicamentos, entre los que se encontraba metadona. El matrimonio duró poco y Anna comenzó a trabajar como bailarina erótica para poder sostener la crianza de su hijo.
El inicio del estrellato
Sin embargo, la suerte de la modelo estaría por cambiar cuando llegó a la conocida revista Playboy, siendo elegida como la playmate de marzo y mayo de 1992, así como la playmate del año. Al poco tiempo la revista Guess en uno de sus números la presentaba como la sucesora de Claudia Schiffer. En mayo de ese mismo año volvió a aparecer en la portada de la revista Playboy y hasta llegó a ser considerada como la nueva Marilyn Monroe.
Una extraña muerte
La suerte de la mujer parecía cambiar y encumbrarse al estrellato. Sin embargo, la vida le tendría preparado un final inesperado. A comienzos del año 2007, y mientras se encontraba en el Hard Rock Café, la mujer se desmayó a causa de una sobredosis del mismo medicamento que un año atrás cobrara la vida de su hijo. Tras el desmayo se produjo vómito, con tan mala suerte que terminó ahogándola.
Pero aquí no para la cuestión, pues la mujer literalmente se quedó sin donde ser sepultada porque su compañero sentimental y su madre, cada uno por su parte, interpusieron recursos legales acerca del lugar dónde sería sepultada. La familia de la modelo argumentaba que la última voluntad de ella era ser sepultada junto a Marilyn Monroe, su máximo ídolo. Su pareja, por su parte, exponía que ella deseaba ser sepultada junto a Daniel, su difunto hijo.
Un cadáver embalsamado
Así las cosas, y tras orden judicial, el 18 de febrero, 10 días después de su muerte, el cadáver procedió a ser embalsamado para dar curso al trámite legal y, finalmente, tras revelarse la prueba de una nota donde la mujer manifestaba su deseo de permanecer con su hijo, la mujer fue sepultada el 2 de marzo, casi un mes después.
Fuente de imagen: facebook.com (Ana Nicole Smith)