A pesar de que hoy en día, para algunas personas de los países industrializados es simplemente inconcebible el permanecer sin acceso a un teléfono móvil, en realidad la existencia de estos dispositivos tecnológicos es bastante reciente, sobre todo, los modelos que son capaces –además de las llamadas de voz- de enviar fotos, mensajes, vídeos e incluso transmitir vídeo conferencias.
Definición de celular
Sin embargo, antes de ahondar en lo que ha sido la historia de estos dispositivos, desde su invención, resulta pertinente revisar la propia definición de teléfono celular, el cual en líneas generales puede ser señalado como una máquina electrónica, capaz de recibir y realizar llamadas telefónicas, de forma móvil, es decir, sin que su usuario deba permanecer en un sitio específico, por lo que le permite a su dueño, deambular por un espacio geográfico limitado (en la actualidad, el mismo país) teniendo la posibilidad de comunicarse telefónicamente a través de su teléfono móvil.
¿Por qué celular?
Aun cuando la denominación más común en España, y algunos países hispanoamericanos sea la de teléfono móvil, debido a su cualidad portátil, se podría decir que su nombre más común es el de teléfono celular. No obstante, no todos los usuarios –tanto de los dispositivos como de este nombre- tienen claro a qué se refieren cuando deciden llamar a sus teléfonos de esta forma. Por consiguiente, algunas fuentes especializadas han reseñado que la denominación “celular” se refiere directamente al sistema de comunicación que utilizan estos dispositivos, y que básicamente consiste en dividir un territorio en pequeñas celdas (de ahí el nombre) en donde se instalan antenas de transmisión, cuya misión es garantizar la comunicación del dispositivo.
Así mismo, los expertos indican que de esta forma se consiguen hechos importantes en la comunicación celular, puesto que entre más pequeñas sean las celdas de comunicación establecidas, más tipos de frecuencias pueden usarse y reusarse, lo que se traduce en mejor calidad de comunicación, así como en un número mayor de usuarios que pueden usar el sistema, de forma simultánea.
Origen de la tecnología celular
Con respecto al momento y lugar preciso en el que surgió la idea de este tipo de tecnología de comunicación, las fuentes históricas reseñan a Estados Unidos, al año 1947 y a D.H Ring, empleado de Laboratorios Bell, como los puntos clave de la primera vez en que un científico llegó a concluir que esta sería una forma de comunicación posible, solo que para el momento se contaban con muchísimas barreras tecnológicas, que no permitieron su desarrollo.
En este sentido, algunos expertos han señalado que básicamente para mediados del siglo XX no existían, o no se manejaban, frecuencias altas, que permitieran la comunicación y transmisión a las distintas antenas de cada célula. Así mismo, la posibilidad de movilidad del sistema celular sólo es posible con la manipulación de una base de datos, que indique al sistema en dónde se encuentra el usuario, para saber en qué celda se encuentra y a qué celda debe mandar la señal, de la forma más rápida posible, a fin de que la llamada, no sólo pueda ser realizada en movimiento, sino sin presentar interrupciones. De esta manera, aun cuando fue concebida como una posibilidad, la tecnología de comunicación celular sólo fue posible treinta años después, a raíz de 1973, cuando la propia compañía Laboratorios Bell se atrevió a incursionar en el desarrollo del primer teléfono celular.
Historia del teléfono celular
No obstante, aun cuando en el mundo actual la telefonía móvil es conocida y manejada por la mayoría del mundo occidental industrializado, de hecho se conoce desde hace bastante poco, siendo una tecnología exclusiva del siglo XX. Sin embargo, a pesar de su escasa edad, son varias las etapas evolutivas por las que han transitado, por lo que para comprender de forma completa su historia, lo mejor es analizarla según estas fases, o para usar el lenguaje de la tecnología celular, en cada una de sus generaciones:
Primera generación
A pesar de que para principios de 1970, casi todas las empresas dedicadas al desarrollo de las telecomunicaciones conocían el principio de la tecnología celular, ninguna se atrevía a invertir en una idea, que aun siendo novedosa, representaba una gran cantidad de recursos, así como de riesgos. Finalmente, en el año 1972, los Laboratorio Bell, en donde había nacido la propia idea, de manos de D.H Ring, decidió patentar el primer sistema celular, recibiendo la aprobación por parte de la Compañía de Patentes.
Al año siguiente, es decir en 1973, la compañía Motorola, con el ingeniero electrónico Martin Cooper trabajaron y lograron fabricar el primer prototipo que haya existido en la Historia de un teléfono celular. Sin embargo, el logro se estableció como definitivo cuando el propio Cooper logró realizar la primera llamada desde un teléfono celular: era 3 de abril de 1973. Al respecto, algunas fuentes resaltan como dato jocoso y anecdótico que el destino de la llamada realizada por Martin Cooper, a través del teléfono perteneciente al Proyecto DynaTAC 8000X, fue precisamente el ingeniero Joel Engel, empleado de la Bell Labs de AT&T, y uno de los mayores rivales y competidores de Cooper en la carrera por mantener la máxima innovación en lo que a telefonía se refiere.
Sin embargo, el mundo debería esperar todavía casi diez años más para que este producto comenzara a ser comercializado, lo cual ocurrió finalmente en 1984, cuando el DynaTAC 8000X fue lanzado al mercado. No obstante, poco parecido guardaba con los celulares de última generación, que pueden ser llevados en el bolsillo, por el contrario este primer modelo de celular, tenía unas dimensiones de 33.02 cm de alto; 4,445 cm de ancho y 8,89 cm de profundidad, así como un kilo de peso, por lo que su cualidad móvil era relativa. Así mismo, aun cuando su batería podía durar un total de ocho horas con el teléfono encendido, pero sin uso, apenas llegaba a una hora durante una llamada.
Por su parte, la compañía Ericsson, que en 1981 había logrado el establecimiento de una comunicación móvil, a través del uso de canales de radio analógicos, que usaban frecuencias de 450 MHz, dio un paso importante en 1984, cuando decidió trabajar con frecuencias mucho más altas, de más de 900 MHz, lo cual le permitió crecer no sólo en números de usuarios, sino en la capacidad de movilización de estos dispositivos.
Segunda generación
De acuerdo a la Historia del celular, se puede tomar a la década de 1990 como el momento en que surgió la segunda generación de telefonía móvil, la cual básicamente usaba sistemas GSM, el cual convivió también con algunos llamados IS-95, IS-95 e iDEN, aun cuando este primero se convirtió en la vanguardia de los sistemas de comunicación celular. Así mismo, esta época se caracteriza por la transición de telefonía analógica a la digital, lo cual no sólo ofrecía una mayor calidad de voz a los usuarios y seguridad, sino que permitía que un mismo terminal pudiese transmitir de forma simultánea varias llamadas, lo que permitía prestar servicio a mucho más usuarios.
Por otro lado, la fabricación de estos dispositivos se hizo mucho más sencilla y a la vez económica, por lo que a su vez se convirtió en muchísimo más accesible para los compradores. Igualmente, la mayoría de las compañías celulares lograron convertir sus redes Amps en D-AMPS, a través de la implementación de la tecnología CDMA y TDMA, lo que les permitió seguir usando las antenas ya instaladas, pero con tecnología digital, hecho celebrado por esta industria pues le significó el ahorro de millones de dólares, que hubiese implicado la fabricación y sustitución de antenas, a fin de dar este paso tecnológico.
Generación 2.5
Sin embargo, la tecnología seguía avanzando rápidamente, y los usuarios ya no se conformaban sólo con el poder recibir y contestar llamada, para lo cual estaba bien una velocidad de datos de 9.6 kbit/s, pero para ese momento –finales de los noventa principios del nuevo milenio- cada día crecía la necesidad de intercambiar otro tipo de datos, como por ejemplo mensajes de texto, incluso fotos. De esta manera, el advenimiento de la tercera generación de dispositivos celulares (3G) se hacía necesario, sin embargo, no existía el nivel tecnológico suficiente, así que con todo el esfuerzo se alcanzó una generación intermedia: la 2.5G, la cual si bien era mucho más rápida pudo cubrir en parte la demanda de los usuarios.
Entre las innovaciones que trajo consigo el surgimiento de esta nueva generación, se encontraba el servicio de EMS, el cual constituía un servicio de mensajería, que daba la posibilidad a sus usuarios de enviar como mensaje sonidos e íconos, lo que pare ese momento constituyó toda una atracción. Así mismo, comenzaron a comercializarse teléfonos que permitían también el envío de MMS, es decir, mensajes multimedia a través de los cuales no sólo podían enviarse sonidos o texto, sino también fotos y vídeos (máximo de 15 segundos) creando un nuevo capítulo en la historia de la telefonía móvil o celular. De igual forma, las tecnologías de comunicación celular fueron migrando del uso del sistema CDMA a GPRS (que le ofrecía al usuario una velocidad de datos ente 59 y 120 kb/s) y al sistema EDGE (que por su parte contaba con una velocidad de hasta 384 kb/s).
Tercera generación
El desarrollo del internet también implicó un reto para los fabricantes de teléfonos celulares, pues se hizo necesario contar con dispositivos, cuya velocidad de transmisión de datos fuese lo suficientemente rápida como para permitirle al usuario hacer y recibir llamadas, enviar datos, sonidos, fotos y vídeos, así como la opción de poder navegar por la red desde su teléfono celular. De esta manera surge un nuevo sistema de comunicación, que permitía alcanzar velocidades de datos entre 144 kb/s hasta 7.2 Mb/s: el UMTS y con él la tercera generación de teléfonos móviles, la cual permitía que sus usuarios pudiesen a través de sus teléfonos navegar por internet, revisar sus correos, enviar todo tipo de datos, realizar vídeo conferencias, ver televisión, escuchar radio, almacenar música, entre otro tipo de funciones.
Cuarta generación
Así mismo, en su carrera por ofrecer cada día teléfonos con mayor cantidad de funciones, que a la vez tengan una mayor rapidez de navegación, contando incluso con ancho de banda, las compañías de telecomunicaciones celulares se dieron a la tarea de crear los teléfonos de cuarta generación, mejor conocidos como 4G, los cuales le ofrecen a sus usuarios la posibilidad de navegar mucho más rápido, tener acceso a imágenes mucho más definidas, así como la utilización de programas que le permiten llevar consigo su oficina, o utilizas apps que le facilitan la vida. Con respecto al sistema que emplea esta tecnología, éste ha sido bautizado con el nombre de LTE, el cual empezó a ser usado primero en Estados Unidos.
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