El Pensante

Interjecciones de traslación

Idiomas y lenguaje - junio 28, 2019

Dentro de los distintos tipos de Interjecciones, reconocidas por la Lingüística, se encuentran las Interjecciones de traslación. Sin embargo, previo a abordar una explicación sobre esta clase de partículas, se tomarán en cuenta algunas definiciones, que de seguro permitirán entender estas palabras dentro de su justo contexto lingüístico.

Definiciones fundamentales

Por consiguiente, se tomará también la decisión de delimitar esta revisión teórica a dos nociones específicas: Palabras e Interjecciones, por encontrarse directamente relacionadas con la clase de partícula lingüística, que se estudiará posteriormente. A continuación, cada una de estas definiciones:

Las palabras

De esta manera, podrá comenzarse por decir que las Palabras han sido explicadas por las distintas fuentes como uno de los distintos tipos de partículas lingüísticas que existen en las lenguas naturales. No obstante, si se deseara tener una perspectiva mucho más específica, también sería necesario tener en cuenta las definiciones particulares que han promulgado sobre ellas las diferentes disciplinas lingüísticas.

En este sentido, se tendrá que por ejemplo la Morfología –materia que se encarga de estudiar la constitución de las partículas- considera que las Palabras pueden ser explicadas como aquellas estructuras morfológicas, que surgen a la luz de la combinación coherente de Lexemas –unidades lingüísticas que aportan a la palabra su sentido léxico- y Morfemas –unidades lingüísticas que se anexan al Lexema, para complementarlo, aportando bien sea información léxica o semántica.

Por otro lado, la Semántica –disciplina que prefiere estudiar los significados- considera que las Palabras han sido explicadas como aquellas partículas lingüísticas con sentido propio, las cuales hacen vida entre dos silencios o pausas, que ocurren en el desarrollo de un texto.

En este punto es necesario hacer un paréntesis para aclarar que siempre que en Lingüística se hable del concepto “texto”, se hará para referirse al Texto oral, y nunca al escrito, en tanto que para esta disciplina el Lenguaje es un lenguaje de signos lingüísticos, vivo y dicotómico, que reside en la Lengua, al tiempo que se materializa en el Habla, por lo que entonces la Escritura queda relegada simplemente a un proceso secundario de registro.

Finalmente, la Sintaxis –área de la Lingüística que se encarga de estudiar las partículas lingüísticas según la ubicación y posición- considera que las palabras han de ser entendidas entonces como aquellas partículas que constituyen el núcleo de la oración, así también como cada una de las partículas que se enlazan para crear esta cadena superior de sentido.

De esta manera, si se toma el Lenguaje, desde una perspectiva que parta de lo micro, y se extienda a lo macro, entonces se tendrá que una combinación coherente de Lexemas y Morfemas puede generar palabras, mientras que la disposición lógica de palabras producirá oraciones, y por último la organización coherente y cohesionada de palabras dará como resultado un texto.

Interjecciones

En segunda instancia, también será necesario lanzar luces sobre el concepto de Interjecciones, las cuales han sido explicadas, a grandes rasgos, como uno de los principales tipos de palabras, que pueden encontrarse en la mayoría de las Lenguas naturales.

Desde una perspectiva mucho más específica, las Interjecciones son explicadas por la Semántica como una clase de palabra, que cumple con la tarea de expresar algunas emociones, sensaciones o incluso experiencias, inherentes al ser humano, como por ejemplo la Alegría, Felicidad, Admiración, Rabia, Odio, Miedo, Rechazo, Asco, Sorpresa, entre otros.

Así mismo, la Sintaxis ha señalado que las Interjecciones pueden ser vistas como una clase de partícula lingüística, que al bastarse a sí misma, es decir, al contar con un sentido completo, que no necesita de otras palabras, construcciones u oraciones, para expresar una significado o idea, entonces puede ser visto sintácticamente como una Oración simple, puesto que funciona como tal.

En tal sentido, las Interjecciones pueden aparecer en el texto de manera aislada, o también en compañía de otras oraciones.

Por último, las Interjecciones también han sido explicadas por la Morfología, disciplina que se ha encargado de explicarlas como una clase de palabra invariable, o en otras palabras, las Interjecciones son partículas lingüísticas que no presentan cambios en su estructura morfológica, derivados de las exigencias de su contexto específico.

Interjecciones de traslación

Toda vez se han tenido en cuenta estas definiciones, puede que ciertamente sea mucho más sencillo tomar un momento para revisar la definición de Interjecciones de traslación, las cuales han sido explicadas de forma general como uno de los distintos tipos de palabras, que existen en la mayoría de las Lenguas naturales, incluido el Español.

Así mismo, la Semántica ha explicado las Interjecciones como aquellas palabras que cumplen con la tarea de expresar emociones específicas. Igualmente, se caracterizan por no ser originalmente interjecciones, sino que se trata de palabras o locuciones que en otros contextos tienen significados particulares, pero que cuando se usan de forma aislada y con cierto énfasis, se convierten entonces en interjecciones, puesto que trasmiten emociones inherentes al humano.

Desde una visión sintáctica, las Interjecciones de traslación son consideradas también oraciones independientes, mientras que para la Morfología estas palabras también constituyen partículas lingüísticas invariables. De acuerdo a lo que han señalado algunas fuentes, en el Español, se pueden encontrar las siguientes Interjecciones de traslación:

¡Anda!
¡Vale!
¡Hay que fregarse!
¡Qué cosa!
¡Cosa más grande!
¡Dios mío!
¡Increíble!
¡No lo puedo creer!
¡Para morirse!
¡De espanto y brinco!
¡Hombre!
¡Niña!

Imagen: pixxabay.com