Representación digital de la Anomalía tal y como ha sido descrita
El descubrimiento del objeto
Lo llamo “anomalía” y no “ovni” o “nave” (a pesar de que eso es lo que muchos dicen que es) porque hasta el momento aún no tenemos claridad sobre lo que realmente se encontró en el fondo del océano aquel 19 de junio del año 2011.
Ese día un radar de la empresa Ocean XTeam se encontraba investigando el fondo marino de un lugar hasta el momento no publicitado en el mar Báltico, entre las fronteras sueca y finlandesa. La empresa, reconocida por sus hallazgos (dentro de los que resaltan un Bombardero B-17 de los Estados Unidos y 2400 botellas de champán Heidsieck & Co Monopoele Goût Americain que se convirtieron en una subasta en el champán más caro del mundo.
En esta ocasión el descubrimiento no estaba del todo claro. Se trata de un objeto de unos 60 metros de diámetro ubicado a 87 metros de profundidad que de acuerdo con la empresa tiene el aspecto de un champiñón achatado. No se conoce la composición del objeto, su procedencia o antigüedad, solo se sabe que parece afectar el funcionamiento de los aparatos electrónicos a su alrededor.
Las afirmaciones de Ocean X Team
De acuerdo con los portavoces de la empresa, en una primera expedición se tomaron muestras de los alrededores del objeto, pero acercarse probó ser algo complicado: la nave Ancylus perdió comunicación por sus teléfonos satelitales y tuvo que alejarse 100 metros de la anomalía para poder recuperar la señal. En cercanías de la formación, de acuerdo con la empresa, las videocámaras también comenzaron a fallar, por lo que resultaba difícil tomar imágenes claras. Como si fuera poco, el sonar del robot también presentó problemas de funcionamiento. Sin embargo, Peter Lindberg (uno de los dueños de la empresa) afirmó que esto no debía ser tomado como la prueba de algo sobrenatural pues en las exploraciones suceden todo tipo de fallos en el equipo.
Sin embargo, pronto comenzó a aparecer un aura de misterio en torno al objeto. En 2012 la empresa organizó 3 expediciones pero nunca recogió muestras: de acuerdo con Lindberg el objeto parecía hecho de hormigón y era rígido y muy duro, por lo que no pudieron hacerle muescas.
En la primera expedición la empresa se encontró con que el objeto estaba bajo piedras gigantescas, lo que la llevó a afirmar que había llegado al fondo marino antes de las glaciaciones “pues el hielo es la única manera como dichas rocas pueden haber llegado allí”. El mismo Lindberg, que se comportaba como escéptico al principio, comenzó a creer que había algo inexplicable en este objeto luego de la primera expedición. Las dos expediciones subsiguientes no lograron ninguno de los objetivos, la segunda por motivos desconocidos y la tercera por condiciones climáticas adversas.
Reconstrucción a partir de los datos del radar
¿Qué es la anomalía del Báltico?
Tras el hallazgo de la empresa los medios europeos comenzaron a elucubrar sobre la naturaleza del misterioso objeto que se encuentra hundido en el Báltico. Se realizaron todo tipo de hipótesis con base en la información brindada por la empresa, que van desde lo sobrenatural hasta fenómenos completamente naturales. Veamos cuáles son:
La teoría del glaciar
De acuerdo con algunas personas el objeto estaría hecho de hielo y sería una reliquia de las glaciaciones. Esta teoría se contradice expresamente con los resultados de la primera expedición.
Por su parte, el profesor de geología Volker Brüchert, quien analizó las muestras de rocas de dicha expedición, afirmó que se trata de un fenómeno de “rocas en equilibrio” generado por los glaciares, algo que no se había visto bajo el océano pero que es relativamente común en la superficie.
La teoría del meteorito
Algunos afirman que podría tratarse de un objeto extraterrestre que chocó durante las glaciaciones atravesando las capas de hielo y depositándose sobre el fondo marino. Entretanto no se obtengan muestras del objeto, es imposible determinarlo.
Teorías ancestrales
Las anomalías presentadas por los equipos de navegación en torno al objeto han llevado a que muchos consideren que se trata de la construcción de una antigua sociedad ya olvidada que desarrolló quién sabe qué tecnología en la inmensa estructura.
La teoría de un platillo volador
Por supuesto, una de las teorías más importantes le apunta al choque de una nave extraterrestre o en su defecto a la construcción de una antigua base submarina, fuera esta de naturaleza alienígena o de una civilización perdida. No cabe duda de que la forma del objeto (“un hongo achatado”) se asemeja mucho a lo que conocemos hoy día como un platillo volador, y que las interferencias en la comunicación podrían estar dadas por la energía que aún emiten algunas máquinas. Sin embargo, en ausencia de muestras de nuevo entramos al terreno de la especulación.
La teoría de la base militar nazi
Una teoría que ha tomado mucha importancia recientemente le apunta a la construcción por parte de los nazis de una base submarina destinada a evitar el paso de submarinos aliados a esta región del Báltico, importantísima para las comunicaciones alemanas. La estructura de Hormigón, según el oficial retirado de la marina sueca Anders Autellus, sería un arma secreta desarrollada por los nazis para impedir las comunicaciones y obligar a los submarinos a dar vuelta atrás. Una teoría semejante le apunta a una torreta hundida.
Imagen donde se muestra cómo podría ser un edificio… o una nave
La teoría de la falsificación
Algunos afirman que la empresa ya conoce la naturaleza del objeto, que no es nada del otro mundo (seguramente una roca) y que todo se trata de una estrategia para atraer publicidad y popularizar el viaje en submarino que están comenzando a organizar al objeto misterioso.
Fuente de imágenes: 1 y 2: i.ytimg.com, 2: frontalnews.files.wordpress.com