Nadie le entra la idea que en la cabeza de un director de cine, puede haber algo tan horripilante y macabro como unir un grupo de personas por medio de la operación quirúrgica. Juntar las bocas con los anos y crear un organismo único fue la representación que hizo Tom Six en sus tres películas, llamadas por él “secuencias”.

Cuando salió al aire la opinión pública se disparó y los grupos religiosos enviaron amenazas de muerte a Tom por su visión horrible sobre el humano. Porque si algo hizo este famoso cineasta fue crear unas películas que retrataran lo peor del humano, obviamente en forma de crítica, pero muchas veces con actitud mordaz e hiriente.

Primera Secuencia: El doctor loco

En la primera película, la inicial de la saga, se muestra un doctor que trabajaba separando siameses. Este extraño doctor loco ideo unir quirúrgicamente dos hermosas chicas y un chino para crear un ciempiés humano.

En una carretera abandonada, las chicas llegan para buscar refugio en la casa de este extraño personaje parecido al famoso Doctor Mengele, el alemán que hacía experimentos biológicos de lesa humanidad contra judíos y gitanos. Aquí las chicas son anestesiadas y luego sufren el experimento del sádico quirúrgico.

Esta película que es vanagloriada por su excelente fotografía, hace sentir un fuerte asco al ver hasta dónde llega la demencia humana. Nadie creería que un director fuera capaz de poner idea tan fuerte en la pantalla hasta que el Doctor Heiter terminó destruyendo los cuerpos de estos tres personajes para crear su querido ciempiés.

Esta película sólo pudo terminar en tragedia, las escenas se van haciendo cada vez más fuertes mientras avanza el tiempo. La sangre y el terror se apoderan del televidente, aunque no es una clásica película de miedo. Acá se nota que el director quiere que el receptor sienta cerca la agonía de los protagonistas y también la desazón suprema.

Segunda Secuencia: El aficionado enfermo

La segunda parte del Ciempiés humano comienza con un enfermo social que disfruta observando la primera secuencia del ciempiés. Efectivamente la primera es vista como una película con la que se obsesiona el personaje: un tipo gordito, con gafas, pequeño y con una mirada llena de odio.

La película que fue firmada a blanco y negro por las escenas tan fuertes que se desarrollaron, tuvo mayor impacto que la primera. En esta entrega Tom Six ya no le importaba nada, sucumbió a denigrar el humano mostrando todo lo que este es capaz de hacer. El personaje (Martin) crea un ciempiés de 12 personas.

La obsesión de ver la película lo va llevando a la idea de buscar un local donde meter a sus víctimas. Así que no teme golpear  con una varilla a quien se le pase por su camino para dejarlos inconscientes. Luego de esto recolecta 12 personas y las une como en la primera secuencia.

Como él no tenía la pericia del Doctor Heiter, utiliza herramientas más ordinarias, le tumba los dientes a las personas con un martillo, le quita las rodillas a las personas con un cuchillo, cose a las personas con una máquina para poner ganchos y así, hasta que completa su ciempiés.

Hablar de esta película es traer a colación lo más asqueroso que uno pueda encontrar entre los asesinos, pues este tipo no deja de sorprendernos a todos por la cantidad de suciedades que se presentan y que tampoco vale la pena mencionar acá. Tom Six desarrolló este personaje con la idea de mostrar lo que puede hacer un hombre traumatizado por su madre, su primera inspiración seguramente fue la emblemática película “Psicosis” del director Alfred Hitchcock.

Algo curioso de esta cinta es que una de las víctimas de Martin es la protagonista principal de la Primera Secuencia, la cual cita para luego hacerla parte de su horrible hazaña. Al final este personaje (Yenny) le mete un ciempiés por el ano a Martin, pero este le pega un tiro.

Tercera Secuencia

Antes de que saliera la tercera parte de la polémica serie del Ciempiés Humano, el director dijo que iba hacer que esta tercera entrega convirtiera a las otras en unas películas de Disney. Y así lo logro.

Esta tercera parte se desarrolla en una cárcel de Texas. Se ha insinuado que es muy parecida a la cárcel de Guantánamo, aunque el parecido con la Cárcel de San Quintín es impresionante. Las ropas anaranjadas de los presos y la actitud déspota y esquizofrénica del director de la cárcel que a toda costa busca castigarlos es una constante en toda la película.

Esta vez no son 12 ni 3 personas las que son usadas para hacer un ciempiés humano. Utiliza 200 personas para crear un ciempiés. Esta película puede que no sea la más fuerte del director británico, pero evidentemente si es la más enferma.

Imágenes: 1: guaridasith.com, 2: swagger.mx, 3: cinebasura.blogspot.com