En el ámbito científico, el sueño es considerado un mecanismo fisiológico, ligado totalmente con funciones de autorregulación y descanso, al cual se somete el organismo, a fin de asegurar su reposo adecuado, como forma de preservarse y autorregenerarse.
Experiencia onírica
Sin embargo, se llama también sueño a la experiencia psicológica en la que, mientras el cuerpo duerme, una parte de la mente humana recrea imágenes y experiencias, bastante vívidas, aun cuando su orden, los escenarios y sucesos que recrea sean pertenecientes totalmente al mundo de la ficción, pues durante el sueño la conciencia no se encuentra ligada a los límites que impone el mundo físico, por lo que se pueden experimentar mentalmente ciertas experiencias que serían imposibles en él, como por ejemplo volar, flotar, traspasar paredes, ver y hablar con personas que murieron anteriormente, identificar a una persona aun cuando su apariencia sea otra, tener otra apariencia, etc. Hecho que convierte al sueño o a la vida onírica en campo de atracción, misterio y fascinación desde siempre.
Teoría freudiana
Aun cuando la experiencia onírica siempre ha sido foco de atención o curiosidad, fue Sigmund Freud y su obra La interpretación de los sueños (1900) –Die Traumdeutung, en su título original en alemán- la que inauguró la tradición psicológica de colocar especial atención a las recreaciones que hacía la mente humana, durante la etapa de no vigilia, puesto que según esta teoría era la ventana más clara que podía tenerse hacia el inconsciente de una persona, entendiendo que –según como lo concebía Freud- es allí donde residen los deseos reprimidos, y en donde por ende pueden estar también las soluciones a algunas fobias o actitudes, así como la respuesta a miles de interrogantes sobre el comportamiento de un individuo.
Desde entonces, el Psicoanálisis presta especial atención a los sueños de los pacientes que trata, desarrollando también todo un glosario de símbolos oníricos, capaces de orientar al terapeuta sobre la forma de interpretar la forma que ciertos deseos, pulsiones o miedos toman en ese plano inconsciente para manifestarse, ayudando entonces a comprender un poco mejor las manifestaciones que estos tienen en el plano consciente, y que en determinado momento puede perjudicar o alterar el desarrollo pleno de la vida de la persona.
Interpretación de sueños
Sin embargo, no fue Freud el primer humano en decidir emprender una cruzada en pro del análisis de los sueños, pues desde la antigüedad estas experiencias se han tomado con gran seriedad, identificándolas como mensajes importantes, que más que del inconsciente como pensaba Freud, se creía que provenían de otras dimensiones. De esta forma, para los antiguos, el sueño tenía un carácter también profético, por lo que su interpretación correcta era necesaria para entender los acontecimientos que traería la Historia en su devenir. Un ejemplo claro de esto lo constituye el pasaje bíblico sobre los sueños de José, y la forma como estos podían profetizar las épocas de bonanza y de pobreza en el reino donde habitaba.
En este sentido, muchísimas son las fuentes populares y esotéricas que se dan a la tarea de interpretar sueños, pues aun cuando a veces se trata de experiencias bastantes claras, la mayoría de las veces los sueños –proféticos o no- se disfrazan de símbolos, por lo que hay que manejar y conocer el lenguaje de los sueños para poder dar un interpretación correcta.
Soñar con agua bendita
Un ejemplo preciso de este tipo de interpretaciones esotéricas sobre los sueños es la lectura que puede tener la experiencia onírica que lleve a la persona a ver durante su sueño agua bendita, bien habiendo visto la bendición de esta o simplemente sabiendo dentro del sueño que se trataba de agua bendita. Al respecto, la mayoría de las fuentes coinciden en señalar que este símbolo puede ser visto como una señal positiva, incluso de buen augurio.
Así mismo, algunos especialistas en el tema han señalado que soñar con agua casi siempre tiene relación con el mundo emocional, incluso por el lado materno, por consiguiente soñar con agua bendita también puede ser interpretado como una señal de purificación de dichas emociones, sobre todo si la persona sueña que es bendecido con esta agua. De igual forma, otras interpretaciones incidan que puede tratarse también del anuncia de una época de buena salud emocional u física.
En otras interpretaciones, soñar con agua bendita, después o durante los conflictos familiares, con amistades o con la pareja, puede estar señalando también la superación de emociones conflictivas, es decir, que la presencia de este elemento dentro de las experiencias oníricas puede representar la llegada del perdón dentro de la persona que lo sueña, es decir, que ya se encuentra preparada para perdonas a aquellos que pudieron dañarle. Igualmente, si la persona sueña que alguien que tiene conflicto con ella le entrega agua bendita puede anunciar el fin del conflicto, y el inicio de una nueva etapa llena de conciliaciones y reconciliaciones, por lo que siempre este símbolo tendrá una interpretación positiva, a no ser que se sueñe que alguien o algo mancha o contamina el agua bendita, caso en el cual se debe tomar como en su sentido contrario, como un anuncio de conflictos, problemas y emociones negativas.
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