Compartir fotografías personales a través de las redes sociales se ha vuelto cada vez más frecuente. Tanto actividades, paseos, eventos familiares, como fotos íntimas, existen personas que publican tales imágenes, día a día. Innumerables problemas de alta gravedad se han desencadenado por ello, como robos, estafas, asesinatos, crímenes y mucho más. Pero sin duda, los niños son los más vulnerables a este tipo de situaciones negativas por el mal uso de las redes. A continuación, las razones por las cuales no se deben compartir las fotos de los hijos:
Pedófilos al asecho
Principalmente y la primera razón es porque un pedófilo puede encontrarse cazando fotos, como por ejemplo para luego venderlas a algún portal o a otros pedófilos. Aparte de eso, como la gente publica muchos datos de su localización, es una carnada perfecta para violadores y aberrados, así como traficantes de personas.
Morphing
Así se le denomina a una práctica que consiste en tomar fotos de personas publicadas en la web y con ellas, realizar montajes fotográficos de pornografía. Por lo general, usan los perfiles de las redes.
Imágenes de libre uso
Algunas redes sociales como Facebook, seden los derechos de autor de las fotografías publicadas con quienes las comparten. Pocas veces se conoce este aspecto, implícito en las condiciones de uso.
No se verifica la privacidad
En muchas ocasiones no se verifica el modo de compartir y resultan de fácil acceso para cualquier desconocido, no sólo para familiares y contactos agregados, sino inclusive, para “los amigos de nuestros amigos y a su vez los amigos de aquellos”.
Brujería y mal de ojo
Dicen que con una foto, es posible que a una persona le hagan magia negra, bien sea de voodoo, o cualquier otra brujería. También hay quienes dicen que “las brujas no existen, pero de que las hay, las hay”.
Problemas conyugales
Puede que alguno de los padres se halle en total desacuerdo de publicar las fotografías. Igualmente, ocurre que en una pareja de divorciados cuando ambos poseen la custodia de los menores, se podría incurrir en una falta legal si se publican fotos sin autorización del otro tutor.
Bullying o matoneo
Es frecuente que muchos menores se hallen buscando material para burlas de sus compañeros y normalmente, suelen buscar en Facebook, imágenes que pueden ser fácilmente modificables y de libre acceso.
Debido a la tendencia de usar la internet de esta forma, pareciera que se ha insertado la necesidad en las personas de exponer cada una de sus actividades y los asuntos familiares que forman parte de la intimidad. Un estudio realizado por Samsung, en un país como España, se descubrió que cerca de 6 millones de imágenes se suben a diario.
Cada día, el uso de internet se vuelve más prioritario y masivo, razón por la cual los niños a muy corta edad acceden a la web. Ellos mismos se ven tentados a publicar sus fotografías en las redes, pues quieren imitar al resto de personas y figurar como ellas. Pero las autoridades y expertos en materia recomiendan que no se les permita y se les explique los peligros.
Imagen: familias.com
