El Pensante

Sufijo -itis

Idiomas y lenguaje - febrero 21, 2018

Quizás lo más conveniente, previo a abordar una explicación sobre el sufijo –itis, sea revisar de forma breve algunos conceptos, indispensables para entender en su justo contexto lingüístico esta partícula morfológica.

Imagen 1. Sufijo -itis

Definiciones fundamentales

En este sentido, tal vez resulte también pertinente enfocar esta revisión teórica a tres definiciones específicas: en primer lugar, deberá abordarse entonces la definición misma de sufijos, pues esto hará posible el cobrar conciencia sobre la naturaleza morfológica del sufijo –itis. Por igual, será de relevancia el tener en cuenta las definiciones de Sufijos nominalizantes y Sufijos según su procedencia, por ser estas las dos categorías en donde la Morfología ha considerado que se puede clasificar este morfema propio del Español. A continuación, cada uno de ellos:

Sufijos

En consecuencia, se comenzará por decir que la Lingüística ha descrito los sufijos, de forma general, como un tipo de morfema tónico, cuya principal función morfológica será la de anexarse siempre de forma posterior a ciertos lexemas, con el fin de conformar nuevas palabras. No obstante, esta disciplina ha advertido también que la razón por la cual los sufijos actúan de esta manera puede responder en realidad a dos diferentes procesos morfológicos, explicados a su vez de la siguiente forma:

  • Flexión: por un lado, la Lingüística señala que existirá un grupo de sufijos, que cumplirá con la tarea de anexarse a ciertos lexemas, con el fin de constituir algunas de las tantas formas que esta raíz o lexema debe asumir según los accidentes gramaticales impuestos por su contexto lingüístico.
  • Derivación: en segunda instancia, de acuerdo a lo que señala esta disciplina, existirá otro grupo de sufijos, que ejercerán tareas derivativas, uniéndose entonces a ciertos lexemas, con el propósito de crear nuevas palabras, las cuales cuentan con total independencia gramatical y semántica, en referencia a la palabra que les ha dado origen.

Así también, la Morfología ha clasificado los sufijos como uno de los cinco diferentes tipos de afijos que existen en las Lenguas naturales, de ahí que entonces se pueda entender esta partícula morfológica en el mismo grupo de los prefijos, infijos, interfijos y circunfijos, de los cuales sin embargo se distinguen, siendo los sufijos los únicos afijos con la capacidad de inferir y cambiar la categoría gramatical del lexema o palabra a la cual se anexan.

Sufijos nominalizantes

En otro orden de ideas, será menester detenerse un momento en la definición de Sufijos nominalizantes, los cuales han sido descritos por las distintas fuentes morfológicas como un tipo de sufijo, es decir, un morfema tónico que se une de forma posterior a ciertos lexemas, el cual se caracteriza por ser un formador de sustantivos. Por ende, los sufijos nominalizantes se anexarán a ciertas raíces para crear junto a ellas palabras que pueden ser clasificadas gramaticalmente como sustantivos.

Empero, la Morfología también acota que los sufijos nominalizantes no crearán un solo tipo de sustantivo, sino que estos se clasificarán a su vez de acuerdo a la categoría gramatical de la palabra de la cual se han originado, distinguiéndose entonces entre sustantivos denominales, sustantivos deadjetivales y sustantivos deverbales.

Sufijos según su procedencia

En tercer lugar, resultará también prudente reparar en el concepto de Sufijos según su procedencia, los cuales han sido descritos por la Morfología como aquellos morfemas tónicos, que además de comportarse como el resto de los sufijos, uniéndose de forma posterior a ciertos lexemas, para crear nuevas formas lingüísticas, se caracterizan especialmente por provenir de forma directa de alguna lengua clásica, como por ejemplo el Latín o el Griego. Por igual, estos sufijos se distinguirán por contar con su propia carga semántica, la cual pasa a formar parte también de la nueva palabra, orientando su significado.

Sufijo –itis

Una vez se han revisado cada una de estas definiciones, probablemente sea mucho más sencillo aproximarse a la definición del sufijo –itis, el cual ha sido señalado por la Morfología como un morfema tónico y derivativo, propio del Español, el cual se une a ciertos lexemas para generar nuevas e independientes palabras, que a su vez podrán ser clasificadas como sustantivos femeninos, lo cual hace entonces que el sufijo –itis sea denominado como un sufijo nominalizante.

Así mismo, esta partícula morfológica del Español ha sido señalada por la Morfología de esta lengua como una partícula cuyo origen etimológico se encuentra directamente relacionado con la voz griega –îtis, la cual es reconocida como un sufijo de esta lengua clásica, de donde puede traducirse literalmente como “inflamación”. Por consiguiente, toda palabra del Español que se forme a raíz de la unión de un lexema con el sufijo –itis conformará entonces un sustantivo femenino que apunte al concepto de inflamación. Generalmente, este sufijo es propio del ámbito médico.

Ejemplos de uso del sufijo –itis

No obstante, puede que la forma más eficiente de completar una explicación sobre este tipo de sufijo sea a través de la exposición de algunos ejemplos, que permitan ver de forma práctica cómo se emplea el sufijo –itis en el Español para la conformación de sustantivos femeninos, que refieran a situaciones médicas en donde se encuentre involucrada la inflamación de algún tejido u órgano, tal como puede verse a continuación:

Apéndice (sustantivo) + -itis (sufijo)= Apendicitis (sustantivo femenino)
Colón (sustantivo) + -itis (sufijo)= Colitis (sustantivo femenino)
Amígdala (sustantivo) + -itis (sufijo)= Amigdalitis (sustantivo femenino)
Faringe (sustantivo) + -itis (sufijo)= Faringitis (sustantivo femenino)
Dermis (sustantivo) + -itis (sufijo) = Dermatitis (sustantivo femenino)

Imagen: pixabay.com