Los Marcadores Textuales –conocidos también como Marcadores de Discurso- pueden ser definidos, según lo señalado por la Gramática, como unidades lingüísticas invariables, las cuales cumplen con la función de ir introduciendo en el discurso distintas ideas, velando por la coherencia del texto.
Características de los Marcadores textuales
Así mismo, en cuanto a las características de este tipo de elementos gramaticales, los expertos en estudios del lenguaje han indicado que estos se distinguen especialmente por ser marginales, es decir, que aun cuando pueden ocupar cualquier posición dentro de la oración (al principios, al medio o al final) en realidad tienen una función casi periférica, pues no hacen parte de la sintaxis de la oración, hecho en donde reside otra de sus características. Igualmente, son reconocidas por cumplir una misión coincidente dentro del texto, guiando al interlocutor para que entienda el orden y sentido de las ideas.
Ejemplos de Marcadores textuales
En cuanto a los ejemplos que pueden generarse sobre los Marcadores Textuales, probablemente la forma más práctica de exponerlos sea respetando la estructura tipológica que la Lingüística ha creado para clasificarlos. A continuación, entonces, los distintos tipos de Marcadores textuales:
Estructuradores de la información
Son marcadores de discurso que se encargan de ir introduciendo, de forma ordenada, las distintas partes del texto. Entre ellos se distinguen varios tipos y clases de palabras:
- Comentadores: en este sentido, así las cosas, pues, pues bien, etc.
- Ordenadores de apertura: por otra parte, por otro lado, de un lado, en primer lugar, etc.
- De continuidad: a continuación, por lo tanto, entonces, así pues, etc.
- De cierre: finalmente, en resumen, para terminar, concluyendo, etc.
- Digresores: a propósito, por cierto, a todo esto, en otro orden de ideas, etc.
Conectores
Por su parte, este tipo de marcadores, cumplen la función de añadir o introducir nuevas ideas al discurso, sin que la aparición de estas pueda atentar de alguna manera a la coherencia del texto. Así mismo, están conformados por varias clases de conectores y palabras, a continuación, algunos ejemplos:
- Aditivos: sumado a esto, además, incluso, inclusiva, encima, aparte, etc.
- Consecutivos: por ende, así pues, en consecuencia, por lo tanto, por tanto, por consiguiente, etc.
- Conectores contraargumentativos: por el contrario, contrariamente, ante bien, no obstante, en cambio, sin embargo, etc.
Reformuladores
Así mismo, existe un tipo de Marcadores Textuales que cumplen con la tarea de introducir oraciones, que sin eliminar la frase anterior, vienen a reformular el sentido de lo que se ha dicho. Entre ellos también se distinguen varios tipos:
- Reformuladores explicativos: es decir, en otras palabras, o sea, etc.
- Reformuladores de rectificación: mejor dicho, para ser más claros, mejor aún, etc.
- Reformuladores de distanciamiento: en todo caso, en cualquier circunstancia, de todos modos, etc.
- Reformuladores recapitulativos: en fin, definitivamente, en suma, en conclusión, etc.
Operadores
Por otro lado, los Marcadores Operadores, también cumplen con la función de introducir nuevos argumentos en el texto, que vengan a reiterar o ampliar lo que anteriormente se ha expresado. Algunos de ellos, concebidos como Operadores de Refuerzo, serán los siguientes: de hecho, en el fondo, en realidad, para ser más precisos, en este sentido, etc.
Argumentativos
Igualmente, los Marcadores textuales pueden cumplir con la función de introducir explicaciones, argumentos o ejemplos. Algunas clases de palabras correspondientes a este tipo de marcadores serían los siguientes: por ejemplo, es decir, en particular, etc.
Marcadores conversacionales
Finalmente, los Marcadores Textuales correspondientes al tipo conversacionales son aquellos pertenecientes sobre todo al ámbito coloquial. Entre ellos, resaltan también varios tipos, entre los que se encuentran:
- De modalidad epistémica: obviamente, por lo visto, según lo visto, desde luego, claro, etc.
- De modalidad deóntica: bien, está bien, bueno, etc.
- Enfocadores de altericad: che, hombre, hola, mira, oye, oiga, etc.
- Metadiscursivos conversacionales: este, eh, bueno, etc.
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