Antes de exponer algunos de los ejemplos que se pueden encontrar en el Español sobre las Oraciones activas predicativas reflexivas, se revisarán la propia definición de este tipo de oraciones, a fin de poder entender cada uno de estos casos en su justo contexto lingüístico.
Oraciones activas predicativas recíprocas
De esta manera, se comenzara por decir que este tipo de oración es una de las tantas clases de estructuras sintácticas que han sido clasificadas según un orden hecho en base al tipo de verbo que tiene en el núcleo de su predicado.
Así mismo, las Oraciones activas predicativas recíprocas pueden ser entendidas como aquellas estructuras sintácticas, en las que existen dos o más sujetos, los cuales realizan un acción, que a un tiempo cae en los otros, así como en ellos mismo.
En consecuencia, una Oración predicativa recíproca, es una oración en donde el verbo predicativo viene a señalar una acción que los sujetos realizan mutuamente entre ellos.
Por ende, este tipo de oraciones se caracteriza por los siguientes aspectos:
- Cuenta con dos o más sujetos.
- Tiene en su composición un pronombre reflexivo
- El verbo que funge como núcleo de su predicado constituye un verbo predicativo, es decir, que señala una acción, pasión o estado del sujeto.
Ejemplos de oraciones predicativas recíprocas
Toda vez se han revisado esta definición puede que ciertamente sea mucho más sencillo abordar la exposición de algunos ejemplos, que pueden darse en el Español sobre las oraciones predicativas recíprocas. A continuación, algunas de ellos:
Mila y Niki se odian mutuamente → en esta oración puede verse un ejemplo de oración predicativa recíproca, en tanto en su estructura se encuentran dos sujetos, así como un pronombre reflexivo y un verbo, cuya acción recae recíprocamente en ambos entes. De esta manera, esta oración cumple con la estructura de una oración predicativa recíproca.
Camilo y Carlos se quieren → así mismo, en esta oración, se pueden ver también los aspectos necesarios para considerarla como una oración predicativa recíproca, ya que en su estructura pueden encontrarse como mínimo dos sujetos, así como una partícula reflexiva y un verbo que está ejecutado por ambos sujetos, al tiempo que cae sobre cada uno de ellos de manera mutua.
Sylvia, Marina y Sol se hablan → finalmente, esta estructura también puede ser tenida como una ejemplo de oración predicativa recíproca, puesto que en ella se encuentran tres sujetos, que realizan la acción mutua de hablarse entre ellos, así que en un tiempo ejecutan la acción, y al mismo tiempo la reciben. Por ende, esta estructura es una oración recíproca.