El 17 de diciembre de 1903 los hermanos Wright hicieron lo que fue reconocido como el primer vuelo de la historia de un artefacto impulsado por un motor, vuelo que tan sólo duró 12 segundos y en el que se recorrieron 36 metros y medio. A partir de allí comenzó una maratónica carrera de perfeccionamiento de los instrumentos que, en el tiempo, mejoraron las distancias y tiempos de vuelo, al punto que se llegó a masificar como medio de transporte.
Sin embargo, junto con la masificación también llegaron los accidentes aeronáuticos, mismos que se han venido sucediendo por cientos. Aun así, y quizás en contra de todo lo que pudiéramos pensar, el avión es el sistema de transporte más seguro del mundo a tal punto que quienes abordan un avión con algún tipo de temor por un eventual accidente deberían tener un miedo mucho mayor al abordar un auto.
La razón es que la posibilidad de morir en un coche es de una entre 112, mientras que en el caso del avión la cifra se reduce dramáticamente a la cifra de una entre 8000, lo cual es realmente bajo.
Aun así, y para quienes les gustaría asegurarse un porcentaje menor, existen datos reveladores basados en un estudio realizado por la revista Time en el que se analizaron 17 accidentes registrados entre el año 1985 y el año 2000. De acuerdo a dicho estudio, la zona más segura es la parte trasera con un porcentaje de mortalidad del 32%, le sigue la zona delantera con un porcentaje de mortalidad del 38%, y finaliza con la zona intermedia con un porcentaje del 39%.
Por supuesto, elegir los asientos de una u otra zona no garantiza nada pero, por lo menos, de acuerdo al estudio, recude matemáticamente las posibilidades de perecer en caso de un siniestro.
Versión de video: El asiento más seguro de un avión