La utilización del agua gélida como medio higiénico y curativo fue común durante la historia, diferentes culturas o grupos hicieron uso de ella. Por ejemplo: los espartanos bañaban a sus hijos recién nacidos en agua gélida y era tanto el aprecio que hacían de hablado medio, que a fin de ofrecer tono y vigor al cuerpo humano se bañaban en cada una de las estaciones del frío en el Eurotas. Píndaro (poeta lírico) dice en una de sus odas olímpicas que la mejor cosa es el agua y luego, el oro.

De Hipócrates a la Modernidad

Otros sabios griegos, como el padre de la medicina Hipócrates, mencionaban el uso del agua no solo para reducir la fiebre y tratar enfermedades, sino -aplicada a diferentes temperaturas- para tratar dolores musculares o afecciones cutáneas, de éste periodo podemos hallar los tratados “Liquidum uso” o “Tract. de aere, aquis et locis” los cuales vendrían a ser las primeras referencias bibliográficas sobre el tema.

Durante la Edad Media se olvidaron los beneficios del agua, pero ue a finales del siglo XVIII que los médicos Sigmund Hanh y Johann Hahn hablaron de los beneficios de la hidroterapia, a su vez combinando la técnica con ejercicios y una dieta saludable.

Actualmente, existen diferentes clases de hidroterapias: la mecánica, la cual combina comprensión para el tratamiento de las varices o para la relación; la térmica, la cual juega con la temperatura del agua; la química, la cual usa sustancias añadidas al agua para obtener diferentes resultados como relajación, sedación, efectos diuréticos.

Fuentes:

1. https://www.caldaria.es/historia-hidroterapia/
2. https://es.wikipedia.org/wiki/Hidroterapia

Imagen: aguasaludymagia.wordpress.com