El Pensante

Historia de la Comunicación

Historia - agosto 14, 2017

Tal vez lo mejor, antes de entrar a describir cada una de las etapas por las que la Comunicación humana ha transitado durante su evolución, sea revisar de forma breve la propia definición de Comunicación, a fin de entender cada una de estas fases, dentro de su contexto justo.

Imagen 1. Historia de la Comunicación

Definición de Comunicación

En este sentido, se puede comenzar por decir que la Comunicación es un proceso humano y social, por medio del cual un emisor busca transmitir un mensaje, por medio de un canal y usando un código específico, a un receptor. En términos antropológicos, se podría agregar que la Comunicación puede ser vista como la base de toda relación humana, así como el hilo que teje los lazos sociales, pues es a través de ella que los miembros de una sociedad intercambian ideas, pensamientos, emociones y planes. En la actualidad, existen varias formas de comunicación, no obstante, la forma de comunicación por excelencia es el Lenguaje.

Proceso de la Comunicación

Así mismo, la Lingüística se ha interesado por poder precisar cuál es el modelo o sistema básico por medio del cual se da la comunicación, esto con el objetivo de poder identificar cada uno de sus participantes, así como las tareas y funciones de cada uno de ellos. A pesar de que existen varios Modelos de Comunicación, quizás el más aceptado es el del lingüista estadounidense Roman Jackobson, para quien este proceso humano respondería al siguiente modelo:

  • Emisor: responsable de pensar, codifica y emitir el mensaje.
  • Mensaje: constituye la serie de ideas que el Emisor desea transmitir.
  • Código: por su parte, el Código constituye el sistema de signos que se usaron para codificar y transmitir el mensaje. En el caso de la Comunicación oral, el Código responde al idioma en el cual fue elaborado el mensaje.
  • Canal: en cuanto al canal, refiere al medio por el cual viajó el mensaje, desde su emisor hasta su destinatario. En el caso de la Comunicación escrita, el canal será el aire, mientras que en caso de una comunicación telefónica, el canal será la propia línea telefónica.
  • Contexto: así también, dentro de la Comunicación se necesita tomar en cuenta el contexto, pues este influye en el proceso, bien porque se refiera a él, o simplemente por ser el sitio o lugar en donde se produce la comunicación.
  • Receptor: finalmente, el Receptor será quien recibe el mensaje, y el fin último del mensaje. Su misión es decodificar el mensaje, a fin de entenderlo e interpretarlo.

Breve historia de la Comunicación

Por su parte, la Historia de la Comunicación puede ser entendida como el proceso evolutivo que ha vivido esta actividad humana, desde los primeros intentos del hombre, por establecer contacto y entendimiento con sus semejantes, hasta la era actual, en la cual existen diversos medios de comunicación, siendo el rasgo más importante el que no se necesita que dos personas estén en el mismo sitio geográfico para poder establecer un proceso de comunicación inmediato. Así mismo, su estudio se hace en base a las distintas etapas por las cuales este proceso ha pasado, tal como se expone a continuación:

Nacimiento de la Comunicación

Aun cuando los investigadores todavía no tienen muy claro cómo sucedieron exactamente todos los aspectos relacionados con el nacimiento de la Comunicación oral, suponen que éste tuvo como base la necesidad instintiva del humano –como ser social- por establecer una forma de relación con sus semejantes. Por consiguiente, se cree que los primeros humanos comenzaron rápidamente a tomar conciencia de su voz, así como de su capacidad de modificarla, generándose poco a poco un complejo sistema de signos abstracto: el Lenguaje. No obstante, este proceso no sucedió tan aceleradamente, y de seguro tardó siglos en desarrollarse.

Durante esta etapa, a la par de la Comunicación oral, que se encontraba en sus primeros estadios, también existía comunicación por medio de sonidos, para lo cual el hombre primitivo usaba –según indican algunas fuentes teóricas- algunas herramientas, como por ejemplos instrumentos musicales primitivos (palos, huesos, caracoles) con los cuales acompañaba sus rituales. No obstante, estos sonidos también pudieron formar parte de la Comunicación humana, por ejemplo en escenas de caza, u otro tipo de actividades sociales. Así también, durante esta época, el hombre primitivo imprimía sus dibujos en las paredes rocosas de las cuevas, dando sus primeros pasos en la necesidad expresiva, que terminaría constituyéndose como escritura.

Comunicación en el mundo prehistórico

Una vez que el hombre descubrió la Agricultura, dando paso al Neolítico y abandonando las cavernas, se estableció en casas, cerca de sus cultivos, se convirtió en un ser más sedentario, y se organizó en sociedades mucho más complejas. Para ese entonces, la Comunicación oral ya había evolucionado bastante, y se podía incluso hablar de lenguas prehistóricas. Sin embargo, para ese entonces, el hombre todavía no había creado la Escritura, es decir, el registro gráfico de su comunicación oral. En consecuencia, la comunicación entre individuos se realizaba a través del habla, así también como algunos sonidos con significados –por ejemplo, sonidos de caza o alarmas. En cuanto a las noticias que debían comunicarse a un colectivo de personas, se usaba simplemente las proclamas, dadas a través de la voz.

Llegada de la Escritura

Con la llegada de la Escritura –aproximadamente en el 4000 a.C.- la Comunicación humana avanzó notablemente, puesto que aun cuando la base de ella seguía siendo totalmente oral, había sido creado un sistema de registro, que no sólo permitía que aquello que se quería comunicar tuviera un soporte más duradero –lo cual venía a resolver el carácter efímero de la oralidad- mientras que por primera vez no era necesario que emisor y receptor interactuaran, pues el mensaje podía enviarse por escrito, a través de un mensajero, que ya no tendría la responsabilidad de recitarlo. De hecho, se tiene evidencia de que algunos pueblos antiguos, como por ejemplo los antiguos griegos y romanos desarrollaron un sistema de correo.

No obstante, es importante señalar que aun cuando se dice que la Humanidad creó la escritura, en realidad eran muy pocos quienes la manejaban, estando su uso circunscrito prácticamente a la nobleza, así como a algunos poderes religiosos, mientras que la mayoría desconocía por completo el sistema, manteniendo una comunicación de tipo oral exclusivamente, aunque seguían existiendo sistemas alternativos, como la telegrafía visual –en donde los poblados se comunicaban a través de fuego y luces, las cuales se veían a distancia- o la telegrafía auditiva, conformada por ciertos sonidos y alarmas, que respondían a un código, para anunciar a la población distintos mensajes.

Comunicación oral y escrita

Poco a poco transcurrían los siglos, la Escritura comenzó a ser un poco más popular, es decir, la gente comenzó a tener mucho más acceso a aprender a leer y escribir, proceso que tuvo su auge sobre todo después de la Edad Media, y durante la llegada de la Ilustración. No obstante, leer y escribir seguía siendo un privilegio de los nobles, los miembros de la iglesia y con el advenimiento de nuevas clases sociales, de la burguesía. Por lo tanto, el vulgo seguí usando la comunicación oral en sus relaciones. En cuanto a la correspondencia escrita, esta seguía enviándose como desde los tiempos antiguos, a través de mensajeros, que empleaban la velocidad del caballo. Uno de los grandes inventos durante los siglos que sucedieron a la invención de la escritura fue la creación de la Imprenta de Gutenberg, durante el siglo XV, lo cual aceleró la producción de textos impresos, la difusión de obras literarias, y de forma colateral también impulso la lectura en la sociedad, revolucionando de una forma que puede ser comparada con la propia invención de la Escritura, o de la rueda, o incluso del fuego.

Llegada del telégrafo

Sin embargo, a pesar de que la llegada de la imprenta colaboró en que las comunicaciones escritas pudiesen ser producidas con mayor rapidez –pues en la época antigua la transcripción manual de un libro podía durar al menos 10 años- todavía existía el problema de la inmediatez, pues el correo seguí dependiendo del transporte en caballo, o en barco, cuando la correspondencia era de un continente a otro. No obstante, eso cambiaría para siempre en el año 1790, cuando Claudio Chapper inventó el Telégrafo, un sistema de cableado capaz de transmitir letras y signos, y que hizo posible que por primera vez se pudiese transmitir un mensaje de un sitio a otro, casi en tiempo real, o al menos en menor tiempo de lo que le habría tomado a un mensajero sobre un caballo recorrer el camino.

Cuarenta años más tarde, este sistema viviría otro gran cambio, con la llegada del Telégrafo eléctrico, el cual comenzó a valerse de la clave morse, siendo capaz de transmitir mensajes, casi en tiempo real, con un código preciso y a por lo menos 15 mil kilómetros de distancia. Para 1844, el mundo moderno estaba ansioso de conocer y usar el telégrafo. Los medios impresos podían conocer las noticias casi de inmediato, así como darlas a conocer. De hecho, fue en ese año que se inauguró la primera línea telegráfica del mundo, la cual se estableció en Estados Unidos, entre la ciudad de Washington y la de Baltimore. Así comenzó poco a poco una de las industrias que más se fortalecería en los próximos años, y cuyo único límite sería el mar, puesto que las líneas de telégrafo que cruzaban los países industrializados, sólo podían hacerlo por tierra.

Telégrafo submarino

Sin embargo, esto fue apenas una inquietud de menos de una década, pues en el año 1850, el mundo dio otro importante paso hacia la modernización de las comunicaciones, cuando logró instalar el primer cable telegráfico submarino, el cual cumplió con la tarea de comunicar Francia con Inglaterra. Tan sólo ocho años más tarde, en 1858, la tecnología dio un paso aún más asombroso, logrando extender un cable telegráfico submarino intercontinental, haciendo posible lo que muchos no creían: comunicar el viejo mundo con el nuevo. De esta forma, el 4 de agosto de 1858, el mundo fue testigo de cómo fue transmitido el primer cable desde Inglaterra hasta América. Obviamente, las distancias se acortaron y el mundo se volvió un poco más pequeño, pues los avances de la comunicación permitían conocer noticias casi en tiempo real de lo que pasaba en regiones remotas, situación que también alimentó al mundo de los medios de comunicación, quienes vieron en los noticieros y los diarios su nueva empresa. Así mismo, la política  y el comercio se vieron igualmente fortalecidos.

La llegada del teléfono

Empero, la civilización se encaminaba a otro descubrimiento que cambiaría definitivamente la forma de comunicarse: el teléfono. De esta manera, según citan los libros de historia, en el año 1876, Alexander Graham Bell fue capaz de transmitir la voz humana, a través de un cable, de un lugar a otro. A pesar de que el invento vivió durante años una gran evolución, no sólo hasta lograr su perfección en la transmisión, sino en lograr que las compañías telefónicas emergentes lograran realmente instalar líneas telefónicas a lo largo y ancho de los países industrializados. La comunicación oral había dado un paso gigante: ahora era posible mantener una comunicación oral con otra persona, en tiempo real, aun estando a kilómetros de distancia.

Nacimiento de la Radio

Para aquellos que creyeron que la llegada del teléfono desplazaría para siempre al telégrafo, pronto la Historia les enseñaría que estaban equivocados. Casi terminando el siglo XIX, el 13 de julio de 1895, Guillermo Marconi logró realizar la primera transmisión del Telégrafo sin hilos, el cual se basaba en un transmisor y un receptor capaces de comunicarse a través de ondas hertzianas. Cinco años después, Marconi había logado que este sistema de ondas, que se conocería finalmente como radio, transmitiera mensajes a través del océano. Las comunicaciones habían conseguido transmitir mensajes instantáneos de un continente a otro, sin necesidad de cables. El siglo XX comenzaba con esta novedad, que empezaba a ser aprovechada entusiastamente por los sistemas de transporte marinos, así también como por las fuerzas militares.

Por su parte, la población poco a poco se integraría al uso de esta nueva tecnología, que hacía que con el uso de una radio, se pudieran recibir y escuchar mensajes a kilómetros de distancia. Fue así, como en el año 1920, la humanidad fue nuevamente testigo de uno de los avances más importantes cuando un discurso fue transmitido a través de ondas hertzianas de un continente a otro. Igualmente, unos años después, el sistema telefónico se valió también de la tecnología radial, dando nacimiento al radioteléfono, el cual permitía la comunicación en sitios en donde ni siquiera había cableado.

Invención de la Televisión

Pero si para el público de las dos primeras épocas del siglo XX la radio constituía uno de los grandes avances de la tecnología, en realidad era la transmisión de la voz humana a kilómetros de distancia era apenas un abreboca para lo que traerían las décadas por venir, en manos de la Televisión. De esta forma, en el año 1926, el ingeniero escocés Juan L. Baird consigue transmitir las primeras imágenes televisivas. Para el año 1932, la población de los Estados Unidos ya disfrutaba de la Televisión como un dispositivo más, el cual les permitía disfrutar de imágenes y sonidos. En 1944, ya en Estados Unidos había sido inventada también la televisión a color, pues las primeras transmitían solo en blanco y negro.

El teléfono celular

Así mismo, durante el siglo XX, no sólo la televisión vivió importantes cambios, sino que el Teléfono dejó de depender del cableado electrónico, para valerse de las ondas celulares. De esta forma, aunque la tecnología necesaria venía desarrollándose desde los años 1940, la generación de los años ochenta vivió de primera mano la llegada de los primeros teléfonos celulares, los cuales permitían a la persona recibir llamadas en el lugar donde se encontrara, siempre y cuando la zona estuviera dentro del área de cobertura de la señal. Sin embargo, aun cuando la tecnología avanzaría a grandes pasos en los próximos años, ya no era necesario estar en casa ni usar cableado para estar comunicado. Con los años, la tecnología celular evolucionaría igualmente al uso de los mensajes de texto, lo cual representaría otro gran cambio en la comunicación humana, al incorporar el uso de la mensajería instantánea como la base comunicativa de algunas relaciones.

Llegada del Internet

Por otro lado, el siglo XX sería testigo también de otra gran creación: el internet. A pesar de que la tecnología necesaria para su funcionamiento, comenzó a desarrollarse desde 1960, no fue sino hasta la década de los noventa que esta nueva forma de comunicación se convirtió en algo popular. Con el tiempo, la mayoría de las personas del mundo civilizado llegó a tener un computador personal en su casa. El correo –aun cuando el antiguo sistema de correo no perdió vigorosidad- dejó de ser solamente físico para convertirse en electrónico, igualmente la tecnología del internet permitió también que las comunicaciones interpersonales se convirtieran cotidianas: surgen las redes sociales, lo cual implica otro gran salto evolutivo en la comunicación humana, cuyos efectos son analizados por profesionales de la conducta humana. Las llamadas telefónicas viven otro cambio, convirtiéndose en vídeollamadas.

El estar comunicado con otros, desde las primeras décadas del siglo XXI y con la llegada de los teléfonos inteligentes, que incorporaron el Internet en sus sistemas, dejó de ser una actividad programada, sino una constante: casi todo individuo del mundo industrializado pasa 24 horas del día conectado –así no esté activo- en las redes sociales con sus conocidos y contactos. La comunicación se convirtió en inmediata, accesible, rápida y constante, lo cual –como han advertido algunos especialistas en conducta humana- no implica que también se haya vuelto más profunda, sincera o empática.

Imagen: pixabay.com