Takahama
Cuenta la leyenda que un hombre llamado Takahama pasó gran parte de su vida en soledad: la gente no le conoció mujer o ninguna relación con alguien especial. El hombre se dedicaba a sus asuntos sin dar más de que hablar a excepción de eso, de su vida solitaria y la cuestión de quién ocuparía su corazón. La vida de Takahama pasó y cuando llegó a una edad demasiado avanzada, los años le pasaron factura.
Él se enfermó y su hermana y sobrino, que eran sus familiares más cercanos, fueron a pasar sus últimas horas con él. Hay un detalle que debemos destacar de nuestro protagonista, y es que él vivía detrás del cementerio del templo Sozanji, algo curioso, pero no fuera de lo normal.
Akiko
Retomando la historia, la hermana y sobrino se encontraban al pie del enfermo, y ambos notaron como una gran mariposa de color blanco entraba por la ventana y se apoyaba cerca de la almohada de Takahama. El chico intentaba espantar al insecto de la almohada de su tío, pero esta siempre regresaba. La mariposa finalmente se fue y el jovencito la persiguió, y se encontró con que el pequeño animal se posó en la tumba de una mujer, cuya lápida decía Akiko.
Intrigado por lo que había visto, el chico le contó a su madre, quien sorprendida le contó que su tío hace muchos años iba contraer nupcias con una mujer llamada Akiko, pero la joven no pudo llegar al día de su boda porque se enfermó de tuberculosis y terminó muriendo.
Takahama, desconsolado juró que no se casaría y que algún día se reuniría con ella en el más de allá. Año tras año, Takahama visitaba la tumba de Akiko, pero cuando la enfermedad le impidió movilizarse fue el alma de Akiko en forma de mariposa la que decidió venir a verlo, un eterno amor. Según la simbología oriental, una mariposa blanca representa la pureza de un alma libre.
Fuentes:
- https://tucuentofavorito.com/la-mariposa-blanca-cuento-japones-sobre-el-amor-eterno/#:~:text=La%20mariposa%20blanca%2C%20un%20cuento,much%C3%ADsimos%20a%C3%B1os%2C%20desde%20su%20juventud.
Imagen: steemit.com