Antes de abordar algunas de las más importantes propiedades curativas, identificadas en las Frambuesas, por parte de la Medicina naturista, puede que lo mejor sea revisar de forma breve algunos aspectos sobre esta fruta, reconocida como uno de los principales tipos de frutos rojos.
La frambuesa: origen y propiedades nutricionales
De esta manera, se comenzará por decir que la Frambuesa ha sido definida por las fuentes botánicas como un fruto, perteneciente al género Rubus, y cuyo nombre científico es Rubus idaeus. Así mismo, los especialistas señalan que este fruto se encuentra cercano a las moras y las zarzamoras, aun cuando suelen ser más pequeñas y rojas.
Así mismo, la Botánica ha señalado que las Frambuesas nacen de un arbusto perenne, que no pasa de los dos metros y medios de altura, y que es reconocido también como una planta oportunista, que se da bastante bien en los claros que pueden presentarse en los bosques o prados. Así también, este arbusto –que nace de forma silvestre, por lo cual es también de fácil cultivo- tiene preferencia por suelos bastante profundos, y más bien ácido. Por otro lado, es importante señalar que el arbusto de donde nace la Frambuesa es conocido por lo general como Frambueso.
Con respecto a las características físicas de la Frambuesa, esta puede ser descrita como una pequeña baya –denominada científicamente como una polidrupa– de color rojo, o color frambuesa, de textura blanda, un poco más pequeña que la zarzamora, y que se distingue igualmente por su penetrante y dulce sabor.
Origen de la frambuesa
Por otro lado, será también necesario tomar un momento para tener en cuenta el origen de la frambuesa. En este sentido, los historiadores y demás investigadores han señalado que la frambuesa puede ser considerada como una fruta originaria de Europa, específicamente de los territorios ubicados en Grecia, en donde este fruto, así como sus grandes propiedades medicinales, son conocidos desde épocas antiguas.
Así mismo, desde Grecia, la Frambuesa viajó a otros países del viejo continente. Se cree que de esta forma, fue conocida primero en Italia, así como en los Países Bajos e Inglaterra. Posteriormente, durante la época de la conquista europea al continente americano, las frambuesas habrían sido llevadas por los ingleses al norte del América, en donde esta fruta se adaptó bastante bien a los terrenos boscosos, y en donde surgieron dos especies de este fruto: la Rubus occidentalis (frambuesa negra) y la Rubus leucodermis (frambuesa azul).
No obstante, Europa y América no son los únicos continentes que cuentan con frambuesas, pues de acuerdo a lo que indican las distintas fuentes especializadas en Asia también existe un gran número de especies. De hecho, los especialistas indican que en este continente hay al menos 180 diferentes especies de frambuesas, que al menos para las primeras décadas del siglo XXI todavía no habían sido catalogadas por completo.
Propiedades nutricionales
Además de ser una fruta de fácil cosecha, los especialistas botánicos y en nutrición han destacado que la Frambuesa puede ser entendida igualmente como una fruta con grandes propiedades nutricionales, entre las que se encuentra ser una gran fuente de Carbohidratos, Azúcares naturales, Fibra alimenticia, Grasas naturales, Agua y Proteínas vegetales.
De igual manera, las Frambuesas son reconocidas por contener una gran cantidad de vitaminas, entre las que se encuentran la vitamina A, B1, B2, B3, B6, C, E y K. Así mismo, en las Frambuesas, se podrán encontrar también gran cantidad de minerales, vitales para el buen funcionamiento del cuerpo humano, como lo son el Calcio, Hierro, Magnesio, Fósforo, Potasio, Sodio y Zinc.
Propiedades medicinales de la frambuesa
Empero, estos componentes presentes en la frambuesa, además de otros más, no sólo hacen que la frambuesa sea reconocida como una importante fuente de nutrientes, sino que también la hacen ser una gran fuente de propiedades medicinales, entre las que se encuentran entonces las siguientes:
Anticancerígenas
De acuerdo a los distintos estudios científicos que existen respecto a esta fruta, se ha podido determinar que las Frambuesas cuentan con una gran cantidad de ácido elágico, componente reconocida como una sustancia con grandes propiedades anticancerígenas. Por su lado, las especies americanas (las frambuesas negras y azules) son señaladas también como una fuente importantes de antioxidantes como el biofenol, así como otros componentes, como por ejemplo el ácido elágico y la antocianina, las cuales tienen la capacidad de eliminar radicales libres, así como evitan también la degeneración de las células y de los órganos en general.
Combaten el estreñimiento
Otra de las propiedades medicinales que pueden encontrarse en las Frambuesas es la de ser una gran fuente de fibra alimenticia, componente este que permite entonces estimular el tránsito intestinal, por lo que entonces el consumo de Frambuesas puede ayudar en cuadros de estreñimiento leve, así como en otros trastornos digestivos. Por igual, la gran cantidad de fibra que contienen este fruto puede tener un efecto positivo en los niveles de azúcar en la sangre, a los cuales ayuda a regular, por lo que entonces las personas afectadas por la Diabetes, o incluso por la Resistencia a la insulina, pueden verse bastante beneficiadas.
Para una buena salud visual
Así también, los especialistas en Medicina naturista han señalado que en las Frambuesas existe una combinación de antioxidantes y grandes cantidades de vitamina A, la cual puede traducirse en una buena salud visual, pues las Frambuesas estimularán la regeneración de tejidos, al tiempo que evitan entonces la aparición de enfermedades degenerativas que puedan afectar al ojo, tanto en su físico como en sus funciones. Por igual, la gran cantidad de vitamina A con la que cuentan las frambuesas hacen que esta fruta resulte también ideal para una buena visión nocturna.
Para la salud fetal
Entre las distintas propiedades nutricionales y medicinales con las que cuenta la Frambuesa, se encuentra la de ser una gran fuente natural de vitamina B9, mejor conocida como Ácido fólico, y que es esencial en el embarazo, para el buen desarrollo del sistema central nervioso del feto. Así mismo, el ácido fólico presente en las Frambuesas evita la aparición de espina bífida en el bebé en formación. Por ende, siempre y cuando no exista algún tipo de alergia o contraindicación, las Frambuesas suelen ser bastante recomendadas durante el embarazo, pues son una fuente natural de este compuesto tan importante para un embarazo sano.
Para una buena función cognitiva
También, dentro de las Cerezas –en base a lo que han señalado los especialistas- puede encontrarse igualmente una combinación que hace de esta fruta un alimento ideal para los estudiantes, así como para cualquiera que desee incentivar sus capacidades cognitivas. En este orden de ideas, los especialistas indican entonces que en las Frambuesas puede encontrarse una buena cantidad de vitamina B9 (Ácido fólico), Fósforo y Zinc, vitaminas y minerales que garantizan la salud cerebral, la regeneración de las células cerebrales, así como el buen estado de ciertas capacidades cognitivas, como por ejemplo la memoria o la agilidad mental.
Combatir el catarro
Igualmente, en las Frambuesas pueden encontrarse también grandes cantidades de vitamina C, componente este que cuenta con la capacidad de combatir, y también prevenir, la aparición del Catarro, así como otras infecciones respiratorias. De hecho, la Frambuesa contiene 32 gramos de vitamina C por cada cien gramos de la fruta, cifra que la acerca bastante a la naranja, cítrico este que por su parte cuenta con 50 gramos de vitamina C por cada cien gramos.
Es cardio-protectora
En la Frambuesa, las distintas fuentes de Medicina naturista, han podido identificar grandes cantidades de Magnesio, componente este que evita que el Calcio de los huesos escape del tejido óseo, migrando hacia otros órganos blandos, como por ejemplo el corazón o algunos vasos sanguíneos. De esta forma, el Magnesio presente en las Frambuesas hacen que esta fruta resulte ideal para evitar la osteoporosis o la descalcificación, al tiempo que ejerce un efecto cardio-protector, pues podría evitar la aparición de accidentes cardiovasculares.
Antiinflamatorio
Además, las distintas fuentes de Medicina naturista han indicado que en las Frambuesas pueden encontrarse ciertos elementos que pueden tener un efecto Antiinflamatorio en el cuerpo, por lo que puede ser usado beneficiosamente en procesos como la colitis, o también la úlcera estomacal. Por igual, este efecto antiinflamatorio podría ser usado de buena forma en caso de torceduras o traumatismos, pues el consumo de Frambuesas ayudaría al cuerpo a desinflamar la zona afectada.
Diurético
De igual manera, los especialistas han señalado que en las frambuesas pueden verse de igual manera capacidades diuréticas, las cuales pueden ayudar al cuerpo a combatir algunos episodios de retención de líquido. Por otro lado, en caso de existir algún cuadro de infección renal, como por ejemplo la cistitis, puede entonces que el consumo de frambuesas, o incluso de la infusión hecha en base a la hoja del frambueso pueda servir para estimular la función renal, permitiendo entonces que las vías urinarias se limpien de forma natural un poco más rápido.
Efectivo cicatrizante
Finalmente, entre los distintos componentes con los que cuenta la Frambuesa se encuentran ciertas sustancias de gran poder cicatrizante. En este orden de ideas, esta fruta puede entonces convertirse en un gran aliado a la hora de una úlcera gástrica, pues entre el poder cicatrizante y sus grandes propiedades desinflamantes, la Frambuesa –en especial, la infusión de hojas de frambueso- puede traducirse en un alimento ideal para ayudar al cuerpo a superar los síntomas negativos que puede generar esta condición.
Así también, el poder cicatrizante de la frambuesa puede usarse de forma externa. Por ende, en caso de que una herida ya esté en proceso de cicatrización, el uso de la Frambuesa puede ayudar de forma importante a la piel a regenerar sus células.
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