Descripción de Benito Juárez

Descripción física de Benito Juárez

En cuanto a la descripción de los rasgos físicos de Benito Juárez, según algunos de sus biógrafos como por ejemplo Patricia Galeana de Valadés¹, se sabe que Juárez era un hombre de pequeña estatura, siendo esta calculada en un metro y medio, y de contextura mediana. Igualmente, refieren sobre su fisionomía –hecho también corroborado en sus pinturas e imágenes- una preponderancia de rasgos indígenas, protagonizados por sus ojos rasgados y negros.

Igualmente, sus biógrafos y retratos dan cuenta de su nariz grande y aguileña, así como de sus pómulos sobresalientes, mentón redondeado, y labios finos. En cuanto a su cabello, igualmente sus imágenes históricas refieren un cabello corto, liso, negro y peinado hacia un lado, con una división lateral.

Descripción de la personalidad de Benito Juárez

Por otro lado, algunos de sus biógrafos hacen énfasis en que Benito Juárez no destacaba como un hombre carismático o jovial, sino que por el contrario podía tomársele como un ser reservado y de personalidad bastante modesta. Así mismo, algunos contemporáneos apuntaron a describirlo como un hombre hermético o indescifrable, características que sus biógrafos actuales atribuyen a su carácter callado y su preferencia a vestir de colores oscuros.

Sin embargo, algunos estudiosos de la vida de este personaje histórico han resaltado que al investigar en su correspondencia privada, se puede percibir un hombre que destinaba sentimientos bastante distintos a los asuntos de su vida, hechos evidenciados a la gran ternura con que Juárez se refería a su familia, de acuerdo a lo indicado por sus estudioso, lo cual establecía un profundo contraste con la frialdad con la que opinaba de los asuntos políticos, en sus epístolas que abordaban este tema, en el que además hubo más de un contemporáneo que lo tildó de excelente político.

Así mismo, destaca su carácter rígido y estricto, así como totalmente apegado a las leyes. Igualmente es señalado por sus conocidos e historiadores como un ser perseverante, y como un político que no tenía al dinero como norte o ambición, pues de hecho cuando murió el Gobierno de México debió acordar una pensión vitalicia para su familia, pues Juárez no había acumulado dinero ni grandes propiedades durante su vida, ni durante su ejercicio como hombre de Leyes o Presidente. Entre otras de sus características singulares se encontraba el vicio del tabaco, actividad por la que el ex presidente mexicano sentía peculiar debilidad, de acuerdo a lo que también han señalado en sus testimonios escritos,  algunos de sus contemporáneos, así como sus principales biógrafos.

1. Patricia Galeana de Valadés, Benito Juárez, Benemérito de las Américas, Biblioteca Iberoamericana, México, 1989.

Fuente de imagen: biografiasyvidas.com