Un duelo largamente pospuesto
Ya hablamos en este portal del duelo entre AlphaGo (la máquina de Google) y el campeón europeo de Go en el que este último resultó absolutamente derrotado. Se trataba de un desafío esperado por décadas, pues hasta ahora el Go era el último reducto de la humanidad: el juego humano por excelencia.
Como lo mencionábamos en aquel artículo, el Go tiene tal cantidad de variables que no existe una máquina capaz de computarlas todas, por lo que ganar con el método que usó Deep Blue – esto es, usando la “fuerza bruta” y calculando cuál jugada tiene mejores probabilidades – es sencillamente imposible. Por esta razón, Google creó un programa capaz de aprender de sus errores, jugar partidas consigo mismo y generar aquello que podríamos llamar “intuición”.
Y el resultado es absolutamente impresionante.
Lee Sedol
Lee Sedol es el campeón mundial de Go y, según sus resultados, el mejor jugador de las últimas décadas. Se trata de un verdadero titán, un genio digno de enfrentar a la Máquina.
Sin embargo, fracasó en su duelo definitivo.
Los 3 primeros juegos los ganó AlphaGo, pero con el 4° tuvo su revancha el campeón mundial. El 5°, de nuevo, fue para la máquina, consagrándola como la indudable ganadora de este enfrentamiento. Esto sucedió pese a las expectativas de prácticamente todo el mundo, que confiaba en que Lee se recuperaría de sus derrotas gracias a una de las características que la máquina aún no puede copiar: la capacidad de analizar el estilo de juego de su oponente y actuar en consecuencia. Pese a sus habilidades como jugador, el campeón humano por excelencia fue derrotado y nos mostró que la I.A. ha llegado a nuevos niveles.
Lee Sedol, campeón mundial de Go
La tecnología de AlphaGo consistió en la creación de un sistema que se retroalimenta a sí mismo y puede “aprender” de sus errores imitando el funcionamiento de un cerebro humano. Estos sistemas han comenzado a ser copiados por empresas como Facebook o Twitter y podrían revolucionar muchos escenarios – como la investigación científica o la robótica – en la próxima década. En muchos sentidos, la victoria de la máquina sobre el hombre demuestra que hemos llegado a un nuevo nivel en el desarrollo de la Inteligencia Artificial: uno de los grandes hitos ha sido superado.
Pero ¿qué viene?
Temor en Corea
Entretanto, la victoria de AlphaGo ha comenzado a tener un efecto inesperado entre los habitantes de Corea: creando un miedo bastante fuerte a las máquinas.
Pese a su origen chino, el Go es prácticamente un deporte nacional en Corea y se le da muchísima importancia, a la altura de las artes marciales. Lo que para el resto del mundo fue una noticia meramente curiosa pasa Corea fue un asunto verdaderamente fundamental. En entrevistas previas al encuentro, Lee había afirmado confiadamente que vencería a la máquina.
Pero no solo no lo consiguió, sino que fue derrotado de manera impecable.
Esto ha causado bastante impresión entre los coreanos, que aseguran que la victoria no fue mecánica, sino tremendamente estética. Esto, más que cualquier otra cosa, los ha llevado a considerar que AlphaGo en verdad desarrolló un tipo de intuición… y si derrotó al campeón en el juego insignia de Corea, ¿qué podría detenerlo?
En esencia, es como si las máquinas ya estuvieran entre nosotros. Algunos han llegado a decir que la pérdida en el cuarto asalto no fue más que una farsa, una manera en que la máquina nos hizo sentir falsamente seguros.
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