Punch y su esposa Judy son dos personajes de los títeres de cachiporra, un acto de comedia del Siglo XVII en el cual uno de los personajes recibe un porra o cachiporra, con antecedentes en el arte de la puesta en escena como la Pulcinella (popular rufián, con apariencia socrática y carácter senequista). Para 1662 se hizo la primera referencia a “Punchinello” en Inglaterra con motivo de una representación ante Carlos II a cargo del titiritero italiano Signor Bologna, alias Policinella. Con el tiempo, estos personajes se convertirían en un símbolo de lucha de las clases bajas contra las clases altas.
En aquellas épocas, lo más probable es que Punch todavía fuera la marioneta rustica con la varilla ajustada a la cabeza. Judy no existía: se tienen registros gracias a los afiches o cronistas de la época sobre el nombre de la primera esposa de Punch, Joan, quien sin embargo eventualmente se convertiría en Judy: ambos son mencionados en los espectáculos que se ofrecían en el siglo XVIII en Londres.
Para el siglo XIX, Punch pasó a ser un títere de guante, perdió una de sus jorobas, le creció la nariz y la barbilla, y comenzó a usar un enorme sombrero de dos picos de almirante. Entre los mejores intérpretes que se podían encontrar del personaje están: el norteamericano George Prentice y el inglés Percy Press, en 1980 toma relevo Percy Press Jr.
Con motivo del 300 aniversario del nacimiento de Punch en 1962 se reunieron en Inglaterra cuarenta conocidos punch-men británicos, para tal espectáculo se construyó un enorme retablo, en el que aparecieron los 40 titiriteros a la vez.
La puesta en escena en la calle
La presentación de ambos personajes era realmente sencilla: solo requerían dos titiriteros, uno que estaría escondido en el teatrillo para dar vida a los muñecos y haría uso de algún otro elemento para dar más vivacidad a la obra y otro que sería el narrador o pregonero, quien convocaría al público al son de una trompetilla.
El narrador hablaría de las desventuras protagonizadas por Punch, un personaje pobre y atrevido con una baja moral para atender los códigos de honor que muestra un lado totalmente diferente al luchar contra los explotadores y poderosos. Sin embargo, paradójicamente a todos sus supuestos actos de valor también acumula otros de índole diferente, actos que sólo un muñeco en aquellos tiempos se podía permitir: ahorcar a un policía, montar en cocodrilo o aporrear a todo el mundo (y en especial a su esposa). Cabe destacar que la época, era (tristemente) más permisiva con los actos violentos y si el personaje gozaba de cierta popularidad, todo era perdonado.
Al matrimonio lo acompañaban otros personajes como el «Bebé» (hijo de la pareja), el perro Toby y el mencionado Cocodrilo. También son frecuentes personajes de tradición francesa como El Doctor, el Alguacil (Le Gendarme), el Sirviente negro, el Verdugo, el Diablo y Mister Jones (equivalente de Cassandre).
La actualidad Punch y Judy
La actuación en vivo se convirtió en la fórmula para que los artistas llevaran su espectáculo a un público. Mas con la influencia de lo ‘políticamente correcto’, más de un comediante ha tenido que modificar su obra, pero es el ingenio del interprete lo que permitirá vivir al famoso Punch en las tablas.
Fuentes:
- https://es.wikipedia.org/wiki/Punch_y_Judy
- https://wepa.unima.org/es/punch-y-judy/
El pensante.com (marzo 26, 2021). Punch y Judy: la ópera de cachiporra. Recuperado de https://elpensante.com/punch-y-judy-la-opera-de-cachiporra/