Venenos, varillas y avispas
Ya ha quedado claro, que cualquier método para mejorar las relaciones sexuales no tenía un límite, fue así como en pleno siglo XX se prescribía estricnina, veneno para ratas, según se decía el producto si ayudaba, aunque con el tiempo se veían sus efectos secundarios y fatales.
A principios de 1800, se creía que las varillas insertadas directamente en la uretra proporcionaban la potencia necesaria para el coito. También se animaba a los hombres a adquirir la varilla eléctrica, 5 a 8 minutos de descargas suaves ayudaba a cumplir con el objetivo.
Según el Kamasutra, una mezcla elaborada con aguijón de avispa y aceites, luego frotar el miembro durante un periodo de 10 días era la cura perfecta para el mal de la impotencia.
Curas desde el Antiguo Egipto hasta la Época Contemporánea
Y por parte del antiguo Egipto, hay una receta que curaba ese ‘mal’, el cual se creía que era causado por una maldición: lo único que se tenía que hacer era triturar corazones de bebés cocodrilos y frotarlos ahí abajo, en algunas ocasiones también llegaron hacer uso del aceite de madera.
Con el descubrimiento del radio en 1898, la gente vio en aquello la posibilidad de curar muchas enfermedades y porque no la impotencia, fue así como mientras algunos hombres bebían agua con radio, otros usaban supositorios. Como era de esperarse varios hombres murieron y finalmente, su distribución fue prohibida en 1938.
Si las mujeres tenían el vibrador, los hombres tuvieron el calentador de próstata: un extremo se conectaba a la toma corriente y el otro extremo, el cual sería una bombilla, estaría introducida dando el calor necesario para generar algún tipo de estimulación.
Ya mencionamos implantes al principio, pero ahora mencionaremos unos más asépticos como los implantes inflables, los cuales se implantan quirúrgicamente y luego se inflan con una bomba. Además, también existen los inflables de metal los cuales son unas varillas.
Finalmente, hablaremos de los cinturones eléctricos, un dispositivo que fue promocionado a finales del siglo XIX y aseguraba curar el ‘nerviosismo’ de los hombres. La publicidad fue fantástica, los resultados un fracaso.
Actualmente, existen productos menos nocivos y más seguros que ayudarían a la población masculina con su predicamento.
Fuentes:
- https://www.youtube.com/watch?v=9-WSjc1Gd0o
- https://www.ancient-origins.es/historia-tradiciones-antiguas/historia-impotencia-007298
- https://historia.nationalgeographic.com.es/a/juicios-impotencia-asi-podian-conseguir-divorcio-mujeres-francesas_17252
Imágenes: 1. https://garciareboll.com/disfuncion-erectil-origenes-causas-tratamiento 2. ancient-origins.es 3. historia.nationalgeographic.com.es
Médicos charlatanes e inescrupulosos
Con una carrera médica a medio camino, John Brinkley retoma su camino a diferentes pueblos granjeros en donde conoce a un hombre llamado Bill quien, acongojado por no cumplir su cometido en la cama, conoció a este galeno charlatán al cual le pidió ayuda para su problema. El médico le dijo que no había cura para su problema, hasta que la solución vino de la misma naturaleza.
Brinkley observó a una cama que era agresiva sexualmente y tuvo la ‘brillante’ idea de hacer un trasplante de testículos cambiando los de Bill por los de la cabra. Nueve meses, la esposa de Bill dio a luz a un saludable bebé. Cabe aclarar que el trasplante fue un fracaso y que tal vez Bill, era solo un marido cornudo.
Otro médico, propuso en su momento que, las inyecciones de semen de perros y cobayas podría curar la impotencia. El iluso del momento fue el doctor Charles Brown Sequar, quien tuvo la osadía de inyectarse el mismo y aparentemente tuvo una gran mejoría, el resto del gremio médico intento lo mismo en sus propios pacientes, obviamente aquello no dejó registros de un verdadero triunfo.
Venenos, varillas y avispas
Ya ha quedado claro, que cualquier método para mejorar las relaciones sexuales no tenía un límite, fue así como en pleno siglo XX se prescribía estricnina, veneno para ratas, según se decía el producto si ayudaba, aunque con el tiempo se veían sus efectos secundarios y fatales.
A principios de 1800, se creía que las varillas insertadas directamente en la uretra proporcionaban la potencia necesaria para el coito. También se animaba a los hombres a adquirir la varilla eléctrica, 5 a 8 minutos de descargas suaves ayudaba a cumplir con el objetivo.
Según el Kamasutra, una mezcla elaborada con aguijón de avispa y aceites, luego frotar el miembro durante un periodo de 10 días era la cura perfecta para el mal de la impotencia.
Curas desde el Antiguo Egipto hasta la Época Contemporánea
Y por parte del antiguo Egipto, hay una receta que curaba ese ‘mal’, el cual se creía que era causado por una maldición: lo único que se tenía que hacer era triturar corazones de bebés cocodrilos y frotarlos ahí abajo, en algunas ocasiones también llegaron hacer uso del aceite de madera.
Con el descubrimiento del radio en 1898, la gente vio en aquello la posibilidad de curar muchas enfermedades y porque no la impotencia, fue así como mientras algunos hombres bebían agua con radio, otros usaban supositorios. Como era de esperarse varios hombres murieron y finalmente, su distribución fue prohibida en 1938.
Si las mujeres tenían el vibrador, los hombres tuvieron el calentador de próstata: un extremo se conectaba a la toma corriente y el otro extremo, el cual sería una bombilla, estaría introducida dando el calor necesario para generar algún tipo de estimulación.
Ya mencionamos implantes al principio, pero ahora mencionaremos unos más asépticos como los implantes inflables, los cuales se implantan quirúrgicamente y luego se inflan con una bomba. Además, también existen los inflables de metal los cuales son unas varillas.
Finalmente, hablaremos de los cinturones eléctricos, un dispositivo que fue promocionado a finales del siglo XIX y aseguraba curar el ‘nerviosismo’ de los hombres. La publicidad fue fantástica, los resultados un fracaso.
Actualmente, existen productos menos nocivos y más seguros que ayudarían a la población masculina con su predicamento.
Fuentes:
- https://www.youtube.com/watch?v=9-WSjc1Gd0o
- https://www.ancient-origins.es/historia-tradiciones-antiguas/historia-impotencia-007298
- https://historia.nationalgeographic.com.es/a/juicios-impotencia-asi-podian-conseguir-divorcio-mujeres-francesas_17252
Imágenes: 1. https://garciareboll.com/disfuncion-erectil-origenes-causas-tratamiento 2. ancient-origins.es 3. historia.nationalgeographic.com.es
Introducción
Es cuestión de dar un vistazo atrás, para entender que la impotencia siempre ha sido un problema presente entre la población masculina y que muchos de ellos buscaron la cura en los lugares más extraños, inclusive muchos de ellos llegaron a morir en el proceso.
Médicos charlatanes e inescrupulosos
Con una carrera médica a medio camino, John Brinkley retoma su camino a diferentes pueblos granjeros en donde conoce a un hombre llamado Bill quien, acongojado por no cumplir su cometido en la cama, conoció a este galeno charlatán al cual le pidió ayuda para su problema. El médico le dijo que no había cura para su problema, hasta que la solución vino de la misma naturaleza.
Brinkley observó a una cama que era agresiva sexualmente y tuvo la ‘brillante’ idea de hacer un trasplante de testículos cambiando los de Bill por los de la cabra. Nueve meses, la esposa de Bill dio a luz a un saludable bebé. Cabe aclarar que el trasplante fue un fracaso y que tal vez Bill, era solo un marido cornudo.
Otro médico, propuso en su momento que, las inyecciones de semen de perros y cobayas podría curar la impotencia. El iluso del momento fue el doctor Charles Brown Sequar, quien tuvo la osadía de inyectarse el mismo y aparentemente tuvo una gran mejoría, el resto del gremio médico intento lo mismo en sus propios pacientes, obviamente aquello no dejó registros de un verdadero triunfo.
Venenos, varillas y avispas
Ya ha quedado claro, que cualquier método para mejorar las relaciones sexuales no tenía un límite, fue así como en pleno siglo XX se prescribía estricnina, veneno para ratas, según se decía el producto si ayudaba, aunque con el tiempo se veían sus efectos secundarios y fatales.
A principios de 1800, se creía que las varillas insertadas directamente en la uretra proporcionaban la potencia necesaria para el coito. También se animaba a los hombres a adquirir la varilla eléctrica, 5 a 8 minutos de descargas suaves ayudaba a cumplir con el objetivo.
Según el Kamasutra, una mezcla elaborada con aguijón de avispa y aceites, luego frotar el miembro durante un periodo de 10 días era la cura perfecta para el mal de la impotencia.
Curas desde el Antiguo Egipto hasta la Época Contemporánea
Y por parte del antiguo Egipto, hay una receta que curaba ese ‘mal’, el cual se creía que era causado por una maldición: lo único que se tenía que hacer era triturar corazones de bebés cocodrilos y frotarlos ahí abajo, en algunas ocasiones también llegaron hacer uso del aceite de madera.
Con el descubrimiento del radio en 1898, la gente vio en aquello la posibilidad de curar muchas enfermedades y porque no la impotencia, fue así como mientras algunos hombres bebían agua con radio, otros usaban supositorios. Como era de esperarse varios hombres murieron y finalmente, su distribución fue prohibida en 1938.
Si las mujeres tenían el vibrador, los hombres tuvieron el calentador de próstata: un extremo se conectaba a la toma corriente y el otro extremo, el cual sería una bombilla, estaría introducida dando el calor necesario para generar algún tipo de estimulación.
Ya mencionamos implantes al principio, pero ahora mencionaremos unos más asépticos como los implantes inflables, los cuales se implantan quirúrgicamente y luego se inflan con una bomba. Además, también existen los inflables de metal los cuales son unas varillas.
Finalmente, hablaremos de los cinturones eléctricos, un dispositivo que fue promocionado a finales del siglo XIX y aseguraba curar el ‘nerviosismo’ de los hombres. La publicidad fue fantástica, los resultados un fracaso.
Actualmente, existen productos menos nocivos y más seguros que ayudarían a la población masculina con su predicamento.
Fuentes:
- https://www.youtube.com/watch?v=9-WSjc1Gd0o
- https://www.ancient-origins.es/historia-tradiciones-antiguas/historia-impotencia-007298
- https://historia.nationalgeographic.com.es/a/juicios-impotencia-asi-podian-conseguir-divorcio-mujeres-francesas_17252
Imágenes: 1. https://garciareboll.com/disfuncion-erectil-origenes-causas-tratamiento 2. ancient-origins.es 3. historia.nationalgeographic.com.es